La luz de Candela, de Mónica Carrillo
Fui feliz. Lo fui. Como los niños que hacen travesuras. La sonrisa idiota en la boca. La lágrima de felicidad que no quiere salir, que se queda agolpada en la cuenca de los ojos, sonriente también ella, juguetona. Moviéndome por las calles sin verlas, sólo mirando a quien era la persona que yo quería, que incluso adoraba, a la que veneraba olvidándome de mí, sin existir, sin una identidad fijada, sin ser yo porque dejé demasiado espacio para que entrara, para que se convirtiera en esa especie de fantasma que invade los sueños. Hasta de eso se adueñó.… Leer la reseña completa del libro "La luz de Candela" “La luz de Candela”