Voces de humo, de Pablo Andrés Escapa
Mi hijo, que aun no ha cumplido dos años, llama puerta a todo aquello que es susceptible de ser abierto, sea una botella o una caja, un interruptor o una ventana y, como no, también un libro. Cuando cogió este libro de la librería, tan irresponsablemente a su alcance, y me dijo “pueta” para que se lo abriera no pude más que sorprenderme de su acierto, porque este libro no se abre simplemente, se entra en él, no es de papel, sino de humo, y no tiene palabras, sino voces. Una puerta antigua de madera con su correspondiente chirrido de bisagras cansadas sería más apropiada que una portada al uso, o tal vez una de esas verjas que se encuentran por el campo cerradas con un alambre.… Leer la reseña completa del libro "Voces de humo" “Voces de humo”