Soy de las que piensan que hasta las cuestiones más complicadas se pueden entender si te las explican bien. Durante toda nuestra vida estudiantil, por ejemplo, el éxito o fracaso de nuestro aprendizaje depende en gran parte de la persona encargada de impartirnos cada materia. Somos curiosos por naturaleza, por eso, cuando un profesor expone su temario con pasión y lo conecta con nuestra realidad, es fácil que nos contagie su entusiasmo y queramos saber más.
Está claro que hay temas y temas. Es más sencillo entender por qué llueve que la teoría de la relatividad, pero con una buena explicación es posible interiorizar los conceptos básicos.… Leer la reseña completa del libro "Crítica de la razón pura: El manga, de Inmanuel Kant" “Crítica de la razón pura: El manga, de Inmanuel Kant”