Las flores no sangran, de Alexis Ravelo
El panorama de novedades literarias de este 2015 ha empezado calentito, muy calentito. Muchos esperaban con interés la nueva novela de Alexis Ravelo, Las flores no sangran, tras las buenas críticas recibidas con La estrategia del pequinés y La última tumba, acompañados también con varios de los premios más prestigiosos del mundo de la novela negra.
Los compañeros de la editorial Alrevés (cuyo catálogo de novela negra está llenándose de grandes autores) me han dado la oportunidad de leer antes de su puesta a la venta (el próximo día 19) lo último del escritor canario; y una vez más me quito el sombrero ante el resultado de la lectura, gratificante a más no poder.
El autor desarrolla su novela nuevamente en la maravillosa isla de Gran Canaria. Allí, entre sol, arena y mar, dispone a mafiosos y rateros de tres al cuarto en el tablero, para desarrollar una historia en la que todo puede pasar. Esta vez se trata de un secuestro exprés; Lola, el Marqués, el Salvaje y el Flipao piensan en darle un palo gordo al empresario Isidro Padrón, uno de los hombres más poderosos de la isla. Un secuestro exprés en una isla suena a plan suicida, pero los cuatro protagonistas del mismo parecen tenerlo todo atado y bien atado. Lo que no saben es que en cuanto comiencen con el secuestro, nada volverá a ser lo mismo.
Ni tres días me ha durado esta nueva historia de Alexis Ravelo. Mientras disfrutaba con su lectura, mi mente tendía a comparar Las flores no sangran con La estrategia del pequinés, y he de decir que tienen varios puntos en común. Ambas historias tienen una estructura parecida y unos personajes cuidados hasta el extremo. Alexis mezcla con maestría a empresarios con ladrones, a matones con policías, a los bajos fondos con la high class; y todo con una forma de escribir que engancha, pues el lector sabe en todo momento que es mejor no encariñarse con ninguno de los personajes, ya que nadie (salvo Ravelo) sabe lo que le deparará el siguiente capítulo.
Otro punto a favor de la novela es la ambientación. Los personajes recorren de punta a punta la isla canaria, para goce del lector. Desde Agaete a Las Palmas y de Tafira a Mogán, los personajes luchan para librarse de la espada de Damocles que siempre tienen pendida sobre ellos. Aunque parece que en un sitio tan idílico como el canario, la espada en cuestión no es tan fiera como la pintan.
Y volviendo a la comparación, sería injusto quedarse con la idea de que el autor ha escrito dos obras muy parecidas. Para mí lo que ha hecho Alexis Ravelo con Las flores no sangran es superarse; ha cogido una gran historia, la ha contado a la perfección, y le añadido toda la sangre, toda la tensión y toda la rabia posible para crear una novela de un negro casi impoluto. Vamos, que mi 2015 no ha podido empezar mejor si lo valoramos solo por sus lecturas.
Alexis Ravelo ya es una de las grandes figuras de la novela negra en España, de eso no hay dudas. Y si dicen que lo difícil no es llegar a la cima, sino mantenerse, creo que el autor canario no tendrá problemas mientras siga escribiendo cosas tan buenas y tan impactantes como Las flores no sangran.
@malagonc
Mi mujer se lo ha leído ya el libro y me habla maravillas de el, voy a ver después de leeros el artículo si me pongo con el libro, muchas gracias.
Otro grandísimo thriller del genial, magistral y universalmente reconocido, gran amigo nuestro, Alexis Ravelo