Siete cuentos japoneses, de Junichiro Tanizaki
En la contraportada de este libro se dice, citando a Edward Seidensticker, que “Tanizaki es a las mujeres japonesas lo que Nabokov a las mariposas”, comentario que me sorprendió porque si bien es cierto que Vladimir Nabokov era un reputado o lepidopterólogo, lo que cabe imaginar que haría con ellas, como es costumbre, debía ser básicamente capturarlas y clavarlas con alfileres en el soporte en el que mantuviera su colección de breves bellezas muertas, como dice la canción. Y me pareció una cita no del todo afortunada para promocionar el libro porque a las mentes mínimamente inquietas bien podía evocarles más una suerte de sadismo que un conocimiento profundo del alma femenina.
… Leer la reseña completa del libro "Siete cuentos japoneses" “Siete cuentos japoneses”