Kobe

Reseña del cómic “kobe”, de Enrique Vegas

Kobe

Kobe (Dolmen Editorial, 2021) es la última obra que nos trae Enrique Vegas.

Creador de historietas donde parodia otros cómics o películas haciendo que los protagonistas sean más rechonchos o cabezones, como en la también estupenda Espiderman (2002, Dolmen Editorial).

En Kobe, Vegas nos lleva hasta el Japón medieval en el año 1132, cuando la rivalidad entre familias por conquistar el poder estaban a la orden del día y era lo que marcaba los tiempos.

Pero entre tantas rencillas surge una historia de amor al más puro estilo de Romeo y Julieta (William Shakespeare, 1597) o del West Side Story, donde dos seres que se aman saben que no pueden estar juntos únicamente porque lo que tienen a su alrededor le dice que no puede ser.

Kobe es un aspirante a Samurai, vive una relación secreta con la hija de su señor y el día que éste le encomienda ir a llevar un mensaje a la familia rival sobre su propuesta de matrimonio para unir los clanes, el muchacho no tiene más remedio que elegir entre amor y honor. Eligiendo esto último, Kobe parte a cumplir su misión. Pero son traicionados por un mal mayor y todo se vuelve a partir de ese momento una necesidad de venganza.

La Editorial Dolmen nos ofrece una edición de lujo y nuevo tamaño de este cómic llamado a ser un clásico patrio y con nombre propio.

La historia se divide en tres actos:

  • I:  las disputas entre los clanes Tonji y Ozaki con Kobe y su amada encontrándose en medio de todo eso
  • II: tras la tragedia, los señores de las grandes casas se sienten amenazados y ven cómo los van eliminando uno a uno
  • III: gran batalla final con Kobe al frente de un ejército en el valle de Kajima por orden del shogun.

Enrique Vegas nos ofrece una bonita historia que, aunque la hayamos podido leer en otras ocasiones bajo otro título, no le quita importancia ni hay que desmerecerla. Esta tiene su por qué, su yo personal.

El deber, el amor, el honor…todo lo que representa la figura de un samurái… todo es cuestionado, defendido y maravillosamente expresado.

Las viñetas que componen la historia van contando la historia y a veces, las letras que las acompañan no son ni siquiera necesarias, porque ellas lo dicen todo.

La ausencia de color le da ese toque mágico que nos lleva directamente al pasado, es como las películas clásicas en blanco y negro, que sólo al empezar y ver esa estética ya sabes que te va a contar una historia del pasado de la humanidad. A mí me gusta este estilo, hace que la sangre sea un poco más dramática.

Kobe, de Enrique Vegas, es una buena novela/cómic para todas las edades. Para los peques de la casa a los que les gusten las historias de espadas, de samuráis…y ya para los mayores es genial. Te puede llevar a la infancia, a los recuerdos de cuando empezaste a leer viñetas.

Una buena opción para regalar, para disfrutar solo o en compañía de otros.

Ahora que he leído esta historia quiero leer la es Espiderman, a ver si me engancha igual que esta.

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