Ácido sulfúrico

Ácido sulfúrico de Amélie Nothomb

Ácido sulfúricoCon Amélie Nothomb empecé mal. El primer libro que leí de ella no me gustó demasiado y no podía determinar las razones de tal disgusto. Sin embargo, ahí estaba en la mesas de las librerías, recomendadísima y yo mirándola de reojo. Quería entender porqué no había sido capaz de captar el atractivo que tiene Nothomb para tantos. Y mirando la lista de libros publicados por ella, decidí volver a intentarlo con Ácido Súlfurico de Amélie Nothomb.

El perverso mundo del reality show se vuelve aún más cruel con un programa de televisión llamado Concentración. Quienes participan no lo hacen por voluntad propia, sino que son reclutados mientras caminan por París para se trasladados a los campos donde viven en condiciones paupérrimas. Los guardias los maltratan y los denigran. Ninguno de ellos tiene nombre, sólo una matrícula que los identifica.

Zdena es una guardiana poco querida, de la que todos se burlan por la falta de inteligencia. Pero comienza a transformarse en el centro de la atención de todos cuando comienza a obsesionarse con una joven bella llamada Pannonique, quien es su prisionera. Zdena se ciega con Pannonique y la reduce a golpes violentos, a burlas que todos pueden ver.

Es esta relación que atrae a los televidentes, a los otros prisioneros y a los guardias. Pannonique comienza a entender el amor de Zdena como una forma de escape de la brutalidad a la que son sometidos. Como una suerte de rebelión, Pannonique grita, patalea y se queja ante todos. Los seres humanos han fallado de nuevo, siendo testigos silenciosos de un horror del que disfrutan al sentarse frente al televisor.

Nothomb creó un mundo que puede permitir decenas de debates por las tantas aristas que pudo reflejar en una novela corta pero sumamente poderosa. La autora belga es cínica, es mala porque nos descubre las bajezas de todos nosotros, esos espectadores de todo aquello que pasa en el mundo, de los consumidores de los reality shows. Negamos el morbo pero eventualmente, parece que todos encontramos alguna razón para subirnos a pesar de las excusas que podamos enumerar. No podemos escaparle y toda una nación que ve el reality show lo sabe. Cómo muchos lo sabían cuando pasaron dictaduras y genocidios.

Pannonique es la rebelde bellísima, esa que todos quieren pero que eventualmente hay que hacerla callar y la historia romántica  y trágica con Zdena como quien debe matar a su gran amor, es lo que todos quieren ver.

Disfruto de una historia que me hace pensar tanto, que me escupe en la cara la crueldad de la que, a veces, somos partícipes sin percibirlo como tal. Pero sobretodo, descubro a una autora que, por una única lectura, se me hubiese escapado de las manos. Y confirmo que Nothomb se merece ese puesto privilegiado en las mesas de las librerías.

Rosario Arán (rosearan@librosyliteratura.es)

Tw. @rosearan

1 comentario en «Ácido sulfúrico»

  1. Uy! Qué identificada me sentí con tu primer párrafo. Yo también leí algo de Amélie Nothomb que no me gustó, o a lo mejor tenía demasiadas expectativas y me decepcionó. Y aún así, he de reconocer que más de una vez me ha podido la curiosidad de saber eso que otros vieron y yo no, y me he visto tentada a volver a intentarlo. Así que después de leer tú reseña, no me queda otra que probar de nuevo. Apuntada queda

    ¡Un abrazo!

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