Hay gente que tiene tanta imaginación que es capaz de crear un mundo paralelo que perfectamente podría existir. Esas personas pueden contar una historia, tan hilada y tan precisa, que no queda ningún cabo por atar. Esos escritores pueden darnos infinidad de libros que versan sobre su mundo. Con estas palabras y, sabiendo que soy una gran Potter head, no podía estar hablando de otra persona que no fuera J.K. Rowling. Y es que esta mujer a mí me fascina. De verdad.
Hace años leí Animales fantásticos y dónde encontrarlos, un pequeño libro que todos los estudiantes de Hogwarts deberían leer. Está escrito por Newt Scamander, un mago interesado por las criaturas fantásticas, que a principios del siglo XX se dedicó a viajar por todo el mundo persiguiendo los seres más extraños que podamos imaginar. En sus breves hojas, encontramos un resumen de cuáles son las especies que debemos conocer si nos vamos a adentrar en el mundo mágico. Porque si algo hay en Hogwarst, son criaturas fantásticas. Y ya no solamente en el bosque prohibido, donde duermen seres que sería mejor no ver con los propios ojos, sino también en el lago negro o incluso dentro de las paredes del castillo —no olvidemos al basilisco—. Y es que para ser un buen mago, hay que conocer las criaturas a las que te vas a enfrentar. O incluso aquellas que pueden, en un momento dado, salvarte la vida, como es el caso del fénix o del hipogrifo. Y eso Harry lo aprendió muy deprisa, en el momento en el que conoció a Hedwig, su lechuza. Esos animales pueden llegar a convertirse en verdaderos amigos, por eso no es de extrañar que todos cojan especial cariño a sus mascotas —pobre Ron, qué decepción se llevó con Scabbers, pero esa es otra historia de la que hablaremos en otro momento—.
J.K Rowling, nos regaló hace años esta maravilla, ahora editada de nuevo por Salamandra, haciendo que nos sintiéramos parte de la saga. Leer Animales fantásticos y dónde encontrarlos es meterse en una clase de Hagrid. Es estar en un aula de Hogwarts. Es sentirse parte de la historia al leer los comentarios que Ron y Harry hicieron en el manual. Es volver a la saga más querida. Es volver a la infancia. Es volver a creer en la magia.
Con este, ya habré leído los siete libros de la saga principal, la nueva historia que habla del hijo de Harry —Harry Potter y el legado maldito—, el guion original de la película de Animales fantásticos y los tres relatos publicados por Rowling —el que nos ocupa, Los cuentos de Beedle el Bardo y Quidditch a través de los tiempos—. Así que creo que ya no me queda leer nada más sobre este personaje. No sé si Rowling se decidirá a darnos más magina en forma de papel, pero si lo hace, tened por seguro que estaré esperando impacientemente para volver a uno de los lugares más felices y que más recuerdos me trae de mi infancia: el castillo de Hogwarts.