Cuentos completos

Cuentos completos, de Hans Christian Andersen

Cuentos completos AndersenHablar de Hans Christian Andersen es hacerlo de un niño que creció rodeado de personajes mágicos, de sirenitas, de valientes soldados de plomo, de cisnes salvajes o maletas voladoras. Es hablar de un autor que llenó espacios vacíos por las noches, para crearnos un mundo nuevo durante el día. Es hablar, como no podía ser de otra manera, de una infancia, la de todos los lectores, que fluyó por mares embravecidos, por aventuras con las que abrir los ojos y no volver a cerrarlos. Pero sin duda alguna es también hablar de un adulto, yo, que encontró esta nueva edición de todos sus cuentos, y no tuvo más remedio que mirar atrás, a una edad mágica, a una edad donde los sueños se hacían realidad con un solo parpadeo, y que generó sueños indescifrables que viven todavía en este cuerpo que empieza a envejecer. Hablar de un autor siempre es hacerlo de nosotros, qué duda cabe que, cuando nos hacemos mayores, recordamos con cariño aquellas lecturas que nos hicieron mejorar. Pero hacerlo de este autor, para mí, es uno de esos regalos que me ha hecho recobrar, muchos años después, los recuerdos de unas sábanas que me acariciaban el cuerpo mientras el sonido de las páginas al pasar se convertían en una puerta hacia otro lado… hacia otra realidad, puede que no mejor, pero al menos sí muy diferente.

 

El paso del tiempo te ayuda a ver las cosas con perspectiva. Un cuento, dos, incluso tres, te vienen a la memoria como si fuera ayer mismo cuando los leías, cuando te los leían, y tú querías más, mucho más de aquellos seres fantásticos y reales que se mezclaban en las hojas y que podías poner rostro gracias a sus ilustraciones. Pero siempre he creído que los cuentos no tenían que ser territorio exclusivo de los pequeños, de los niños. Por ello me decido a reseñar esta colección que Cátedra nos trae, porque no hay nada mejor para entender cómo la edad va pasando y nosotros seguimos siendo niños en cuerpos de adulto. Y es curioso como, después de mucho tiempo, sigo descubriendo algunas historias que no conocía, que me habían pasado desapercibidas, y sigo emocionándome como si tuviera cuatro años cuando los personajes me cuentan una aventura creada por la imaginación de un autor que nunca se olvida.

Pero esta edición de cuentos encierra mucho más que eso. Nos traslada hasta la vida de su autor, nos explica su biografía y nos emplaza a entender, desde otra visión, lo que significaron los cuentos con los que crecimos. Es por ello que se vive esta recopilación con una mezcla de ingenuidad y realidad, porque los dos mundos se cruzan: por un lado el adulto, en las primera páginas, y por otro el de la niñez, cuando nos embarcamos en la lectura de aquellos relatos que nos hicieron soñar y de aquellos que no conocíamos, pero que podremos contar a partir de ahora, convirtiéndonos nosotros mismos en un cuenta – cuentos perfecto, de esos que impostan su voz para poner en cada sílaba el tono adecuado, viviendo junto a nuestros hijos, y junto al niño pequeño que nunca debemos perder, aquellas aventuras que nos envolverán, nos acariciarán, nos harán temblar por el escalofrío que recorre nuestro cuerpo, para poder soñar que vivimos durante mucho tiempo pensando en aquellos personajes que hoy nos vuelven a visitar, nos hablan desde las páginas, y nos saludan con una fuerza tal que es imposible no prestarles atención.

Aquellos que nos leéis, que leéis lo que escribo, sabréis que los cuentos son para mí como una droga que se mezcla con la sangre. Y que añoro aquella época en la que mi cuerpo no se levantaba casi del suelo. Por eso son estas ediciones las que hoy en día me hacen reconciliarme con un mundo cada vez más caótico. Y creer que Hans Christian Andersen todavía tiene mucho que decir, todavía nos puede susurrar a través de las páginas que la vida es una aventura constante, una mirada al mundo que no nos debemos perder, y eso, aquellos que estéis al otro lado de la pantalla, os aseguro que me hace caminar con más fuerza cada mañana.

Lo que acontece en estas páginas, no son sólo cuentos, como ya habréis podido comprobar. Lo que se cuenta aquí es toda una vida, y por ello se convierte en un regalo, en un libro imprescindible que se vive, de principio a fin, como si el alma que vive en los libros se introdujera en nuestro cuerpo y nos hiciera encontrarnos con nosotros mismos, sólo que con unos centímetros menos y mucha más felicidad.

2 comentarios en «Cuentos completos»

  1. acabo de comprar este libro porque como a tí, me traen buenos recuerdos de cuando los leí siendo niña. Y no sabes las ganas que tengo de comenzarlo.
    Gran reseña ¡gracias!

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