Soy una fan incondicional de El gran Gatsby. Las líneas finales de esta novela llevan acompañándome casi toda la vida. Todos los años, cuando estreno agenda, lo primero que hago es copiar las siguientes líneas en ella:
“Gatsby creía en la luz verde, el orgiástico futuro que, año tras año, aparece ante nosotros… Nos esquiva, pero no importa; mañana correremos más deprisa, abriremos los brazos, y… un buen día… Y así vamos adelante, botes que reman contra la corriente, incesantemente arrastrados hacia el pasado.”
Una vez escritas en la agenda, ya puede empezar el año. Es algo que llevo haciendo años. Sí, es una manía muy loca, muy TOC, muy de la menda.
¿No habéis fantaseado con iros una temporada a vivir dentro de un libro? Yo me iría a las fiestas locas de Jay Gatsby. Me pondría un precioso vestido años veinte, un largo collar de perlas y muchas plumas y me perdería en el jardín de Gatsby mientras la música jazz suena a lo lejos. No es mal plan, ¿no? Adoro aquellos locos años veinte, su lujo, elegancia y savoir-être. Me gusta para un tiempo, claro. No podría quedarme demasiado por allí porque, inevitablemente, todo ese lujo y suntuosidad esconden algo más oscuro.
Mi deber es hablaros de este libro, aunque también lo es regañaros si no lo habéis leído. Además podría regañaros doblemente si no conocéis la historia porque tenéis varias versiones en película para elegir. A mí me gustó mucho la que dirigió Baz Luhrmann, ese director tan extremo, en el año 2013 con Leonardo Dicaprio en el papel de Gatsby. En cualquier caso, el libro es mucho mejor. Y si os da pereza el libro… ¡chán, chán! La solución puede ser este manga que hoy os traigo. Pero antes de nada, os pongo en situación.
Jay Gatsby es quizá uno de los personajes más conocidos y misteriosos de la literatura universal. En realidad nadie sabe muy bien quién es ni cómo ha llegado a ser quién es. Nick Carraway es un joven escritor que se muda a Long Island. Allí se reencuentra con su prima Daisy, su marido Tom y Jordan, una joven golfista profesional. Nick tiene por vecino a Gatsby, un excéntrico personaje que celebra lujosas fiestas en su casa casi todas las noches. Sin embargo, aunque Gatsby siempre esté rodeado de gente, ninguna de esas celebridades y personajes son realmente sus amigos. Gatsby esconde un secreto que sólo Nick conocerá. Podríamos decir que Nick se convierte en el único amigo de Gatsby. No seré yo quien desvele el secreto de Gatsby ni todo lo que acontece en la novela. ¡Leed, leed, malditos! Pero sí os diré que esos años locos veinte, llenos de excesos y lujos acabarán escondiendo mucho más: una decadencia inminente y una falta de valores de lo más feo. Sin embargo, F.Scott Fitzgerald lo hace bonito. O al menos el mundo que él recrea mediante una prosa exquisita y llena de nostalgia.
Ahora sí puedo hablaros de El Gran Gatsby, El manga. Hace un tiempo reseñé La metamorfosis, El manga y os hablé de la iniciativa de la editorial La otra H. Adaptar libros clásicos al arte del manga debe ser difícil, pero los resultados, hasta ahora, son bastante interesantes. Claro que leer solo la adaptación al manga no es lo más recomendable, pero me parece una forma muy original de hacer llegar a los jóvenes (y freaks) los grandes clásicos de la literatura universal. Hay algunos libros que admiten mejor la adaptación al manga que otros. En el caso de La metamorfosis me gustó bastante. Con El gran Gatsby me pasa que como soy una gran admiradora, este manga me ha sabido a poco. No es una novela fácil de adaptar y confieso que aunque me la conozco de memoria, a veces me he perdido siguiendo el manga. Aun así, como primer acercamiento a la novela de Fitzgerald me parece muy recomendable. También para fieles seguidores de Gatsby y coleccionistas raretes como la que escribe.