Reseña del libro “El lado oscuro de la cultura victoriana. Jack el Destripador y otros monstruos”, de Antonio Ballesteros González
La época victoriana (1837-1901) quizá sea la más presente en nuestro imaginario colectivo, con independencia de que hayamos leído muchos clásicos. El racionalismo del siglo XVIII había dado paso al Romanticismo y nació lo que hoy conocemos como novela gótica, donde la alteridad, lo extraño y lo sobrenatural se opusieron a la razón cartesiana.
No sé por qué, yo tenía la impresión de que no había leído demasiada literatura de esa época, a pesar de que sus elementos me encantan, por eso me interesé por El lado oscuro de la cultura victoriana. Jack el Destripador y otros monstruos, de Antonio Ballesteros González.
En su esclarecedora introducción, el autor ya deja claro que el eje de su obra va a ser la monstruosidad, nacida del miedo a lo desconocido y a la muerte. Y a lo largo de las doscientas setenta y una páginas de El lado oscuro de la cultura victoriana. Jack el Destripador y otros monstruos constataremos que los monstruos más famosos de todos los tiempos surgieron en esta época.
Como bien explica Antonio Ballesteros González, los monstruos reflejan los temores, valores, prejuicios y estereotipos de cada periodo histórico y cultural, ya sean de índole étnica, sexual o social. En la época victoriana, Inglaterra mostraba su cara más puritana mientras escondía una elevadísima tasa de prostitución. Y los vertiginosos avances científicos suscitaban infinidad de dudas con respecto a la ética y a futuros nada halagüeños. En ese caldo de cultivo, aparecieron novelas que marcaron un antes y un después en la literatura, y en El lado oscuro de la cultura victoriana. Jack el Destripador y otros monstruos se analizan las principales.
Me ha sorprendido que yo, que creía que no había indagado lo suficiente en esta época, he leído la mayoría de las que menciona: Frankenstein, Cumbres borrascosas, Jane Eyre, Cuento de Navidad, Otra vuelta de tuerca, El extraño caso de Dr. Jekyll y Mr. Hyde, El retrato de Dorian Gray, La guerra de los mundos, La máquina del tiempo, El hombre invisible, Drácula y El corazón de las tinieblas. Solo me falta La isla del doctor Moreau, una de las apuntadas en mi lista de eternos pendientes.
Cabe resaltar que no solo de monstruos imaginarios habla El lado oscuro de la cultura victoriana; tal como señala el subtítulo, «Jack el Destripador y otros monstruos», el asesino más famoso de todos los tiempos tiene especial protagonismo, pues Antonio Ballesteros González dedica casi setenta páginas a describir a sus víctimas, a desgranar las distintas hipótesis sobre quién fue realmente y su impacto en la prensa, que alcanzó también grandes cotas de monstruosidad.
Quienes no quieran spoilers y tengan pensado leer las novelas mencionadas deberían abstenerse de leer este libro, ya que Antonio Ballesteros González habla abiertamente de ellas, incluso mencionando el final. Aunque, tratándose de las obras que son, mil veces versionadas y adaptadas al cine o al teatro, raro será que no se conozcan de antemano. La grandeza de esas novelas es que ya forman parte de nosotros sin que nos demos cuenta, por lo que su lectura no pierde encanto ni siquiera sabiendo los principales giros de la trama. Los que ya hayan disfrutado de ellas, también lo harán de El lado oscuro de la cultura victoriana. Jack el Destripador y otros monstruos, un interesantísimo análisis de una literatura y de una época imprescindibles para comprender todo lo que vino después.