Hace un año, sobre estas fechas, me estrenaba como reseñista en este blog, y la primera colaboración que hice fue con el sello Puck y El mundo oculto de Sabrina: El camino de la bruja, libro que me hizo especial ilusión y que disfruté muchísimo.
Por eso, cuando Puck sacó a la luz el segundo tomo El mundo oculto de Sabrina: La hija del caos, tuve que hacerme con un ejemplar y así volver a Greendale de la mano de mi querida bruja adolescente Sabrina Spellman.
En esta ocasión, Sarah Rees Brennan nos ofrece una continuación en toda regla de aquel primer libro. Lo que veremos en este son las consecuencias directas de todo lo que ocurrió en el anterior.
No obstante, también os digo que si no habéis leído el primero no pasa nada, ya que los personajes nos van poniendo en situación y rápidamente en las primeras páginas vais a coger el hilo sin problema. Además, tened en cuenta que esta es una nueva aventura de Sabrina, por lo que una vez que nos ubicamos, la autora nos abre la puerta de manera fluida y oscura a este episodio.
Nuestra joven bruja ya ha tomado la decisión más importante de su vida, aquella que dio forma al primer libro. Y como cualquier otro adolescente que debe afrontar el paso a la madurez y a una responsabilidad inminente, Sabrina ha elegido un camino. Solo que aquí la cuestión no está entre estudiar en la universidad o trabajar en un negocio familiar. No. Ella ha tenido que dejar atrás su vida mortal para ceder su alma a Satán y ocupar su lugar en el aquelarre de la Academia de las Artes Ocultas.
Aun así, Sabrina se resiste a desligarse completamente de sus amigos mortales. Así que, cuando utiliza la magia para ayudar a su amiga Roz, un demonio de la mala suerte aparece y con él llega el desastre.
Para evitar el castigo de su tía Zelda, a Sabrina no le quedará más remedio que recurrir a dos brujos: el seductor Nick Scratch y la cruel Prudence. Pero, ¿serán las brujas y los brujos de fiar? ¿Estará Sabrina tomando el camino correcto al confiar en ellos?
Para qué mentiros. Yo tenía muy claro que leer este libro era apostar sobre seguro. Me habría decepcionado si no me hubiera encantado. Pero afortunadamente, al igual que me pasó con el anterior, me he encontrado en mi salsa.
En este, al igual que en el anterior volumen, la autora nos regala capítulos muy cortos que dan ritmo a la historia. Capítulos a diferentes bandas: unos en primera persona con la voz de Sabrina, y otros en tercera persona mostrando al lector los pensamientos, sentimientos y percepciones de distintos personajes, desde la bruja despiadada Prudence hasta el mortal y ya ex novio de Sabrina, Harvey.
En mi opinión, Sarah Rees Brennan ha dado en el clavo al ofrecernos este formato, pues nos deja claro que por mucha brujería que haya de por medio, todos ellos no dejan de ser adolescentes y esto una historia de amores, desamores, anhelos, falta de afecto y búsqueda de cariño.
He vuelto a ser testigo de las diferencias que existen entre mortales y brujos. Parece que no, pero ambos entienden la vida de distinta forma. Y aunque las brujas se hagan las duras y se mofen de lo sentimentales que son los mortales, en el fondo saben que no les vendría mal sentir un poquito de lo que son capaces de experimentar estos.
Si ya dije hace un año en la reseña del primer tomo que el primo Ambrose me había resultado escalofriante pero que luego le había llegado a coger cariño, lo mismo me ha ocurrido en esta ocasión con Prudence. Esa bruja a caballo entre Draco Malfoy y Miércoles, cuyo negro corazón resplandecerá en ciertos momentos de la historia y se llenará de tristeza buscando siempre el amor de un padre demasiado ocupado para ella. Ella, una bruja que odia a los mortales.
Sin embargo, algo bueno y necesario es esa relación que establecerán Prudence y Nick con un mortal, demostrando de esa forma que a pesar del rencor y las diferencias, cuando hay algo en común más fuerte y poderoso, los que se odian pueden llegar a trabajar juntos.
Así que, lectores, si sois de los míos, si os gustan las brujas, los aquelarres, la fantasía oscura, los protagonistas adolescentes y las novelas young adult, estoy segura de que vais a disfrutar con El mundo oculto de Sabrina: La hija del caos.