El mundo según Garp, de John Irving
¿Cuánto influye el estado de ánimo del lector en la recepción que hace de la lectura de un libro? La tiene. Si yo no hubiese estado pensando en mil cosas a la vez, si noviembre no fuese un mes que me está corriendo y no me deja descanso, ¿Habría encontrado otras cosas? Siento que podría hacer una crítica negativa, que tengo una opinión del libro de la que soy consciente que no estoy conforme. Porque si me atrajo, porque si quería leerlo, porque fue entretenido. El rechazo, lo sé, es consecuencia de la falta de relajación que tengo. Lo admito acá y ahora. No es un libro malo, sólo que lo leí en el momento inadecuado. Entonces, El mundo según Garp de John Irving, merece su espacio en Libros y Literatura.
Jenny Fields, protagonistas atractivos si los hay, es enfermera. Se embaraza y luego de 9 meses nace T.S Garp. Unidos por esas relaciones de madre sobreprotectora y chico callado, Garp comienza a transitar en la vida y así, se inicia el moldeado de su propio mundo, aquel que le da nombre a la novela escrita por Irving.
La novela es un recorrido por la vida de Garp, un hombre que fue concebido de una forma poco convencional y que sólo quiere transformarse en escritor. Y en el medio, se enamora, tiene hijos y continúa encontrándose con varios personajes que toman parte en el mundo de una sola persona. Desde las circunstancias ridículas hasta los hechos trágicos y no tanto, todos constituyen una parodia o representación de lo que realmente es el paso de todas las personas en la vida.
Garp reflexiona, arroja bromas y se enfrenta a eventos en la vida ligados a su propio mundo de escritor pero también a la de su excéntrica madre. Sin duda, Jenny Fields compuso el personaje más atractivo de todos –a mi parecer- por su punto de vista sobre las mujeres y la escritura.
Sin duda, se trata de una novela con mucho ritmo, que no aburre en absoluto. Irving hace entretenida la lectura, aunque haya algo que me disguste levemente en su forma de escribir. Una de las explicaciones que le encuentro, es que esperaba otra cosa de esta novela. Quizás lo que me vendió la contratapa terminó por hacerme creer que iba por otro camino que al final no fue tan inocente como las expectativas que tenía.
Pero tiene personajes que le otorgan sentido a una historia que, de lo contrario, seria plana. Por momentos, con dosis que llegan a lo ridículo aunque se trata de las peores cosas por las que deba atravesar un ser humano. Es que de eso se trata, de arrojar aquellos sucesos que les ocurren a algunas personas, aunque aquí todo parece concentrarse en el protagonista, Garp.
Es verdad que yo me encontraba de mal humor y sobrepasada mientras leía este libro. Me irritó Irving pero no su historia, o sino las expectativas que me armé sola. Pero no es un libro malo en lo absoluto, es una parodia a la vida de las personas y a la forma que tenemos de pensarla y vivirla. El estado de ánimo influye, así como a un escritor como a Garp, la vida influye en aquello que da forma a su mundo.
Rosario Arán (rosearan@librosyliteratura.es)
Yo sí creo que cada libro nos habla dependiendo del momento en que lo lees y por eso suele ser muy interesante pertencer a un club de lectura o releer un libro (que nos guste, sino puede ser insoportable jejejje) en distintos momentos de nuestra vida.
Un placer leerte Rose!
Es cierto que no siempre estamos dispuestos a leer un libro, pero en otro tiempo no encontramos obstáculos.
(Osasco-São Paulo-Brasil)
(É verdade, nem sempre estamos preparados para ler um Livro, mas em outro momento não encontramos obstáculos.)
Totalmente de acuerdo con que el momento de leer un libro tiene una enorme importancia.
Al margen de eso, este es uno de los libros que “me ha dejado huella”. Considerando mi provecta edad, que he leído un número muy considerable de libros en mi vida y que muy pocos me han dejado huella, creo que algo tendrá esta novela que yo recomiendo leer. No soy fan especial de Irving, pero este libro…”tiene tela”.
El Món segons Garp em va irritar, em va posar de mala llet, i ara, quan ja fa dies que l’he acabat, no me’l puc treure del cap.
El Mundo según Garp me irritó, me puso de mala leche, y ahora, cuando hace ya días que lo he terminado, no puedo sacármelo de la cabeza.