Este es uno de esos libros a los que te lanzas prácticamente a ciegas. No conocía a la autora ni había oído hablar del libro, pero me bastó leer el subtítulo y la sinopsis para querer leerlo. Expuesta, como dice el subtítulo en la portada, es “un ensayo sobre la epidemia de la ansiedad”. Para quienes hemos sufrido o sufrimos ansiedad, leer las experiencias de otras personas creo que, en cierto modo, nos reconforta. No porque nos alegremos al pensar que los demás también padecen ansiedad, sino más bien por tratar de reconocernos de algún modo en las palabras de otros. Yo no tengo ningún problema en reconocer que padezco ansiedad y que tengo épocas mejores y peores. Es algo con lo que terminas aprendiendo a vivir y más o menos te acostumbras, aunque a veces es una auténtica putada.
Leer este tipo de libros es como querer dar con la clave de lo que te ocurre a ti, aunque en el fondo sabes que eso es bastante improbable, pues los caminos de la ansiedad son inescrutables y cada cual carga con su cruz. Para no ser católica, esta analogía me ha quedado muy divina. (El Papa Francisco aprroves it). Coñas aparte, el tema, como os digo, me atañe e interesa mucho y es verdad que, desde hacer tiempo, vengo notando que cada vez hay más gente con problemas de ansiedad. Aunque esto no sé si es del todo cierto, pues también podría ser que hoy en día, gracias a dios, la sociedad está más abierta en relación a las enfermedades mentales y la gente tiene menos reparo en confesar sus problemas.
Sea lo que fuere, Olivia Sudjic ha publicado este Expuesta, traducido por Javier Guerrero y publicado por Alpha Decay, en el que realiza una reflexión en torno a la ansiedad. Y aquí tengo que discrepar, o al menos discrepar con lo que yo creía que me iba a encontrar en este libro. No es tanto un ensayo sobre la ansiedad como tal, sino una reflexión de la autora sobre sus propias vivencias en relación a este tema y una investigación paralela sobre la literatura femenina. ¿Qué tienen que ver estos dos temas?, os preguntaréis. Pues bastante más de lo que en apariencia parece y es que la literatura femenina actual (y no tan actual) suele ser bastante más introspectiva y los problemas ajenos y propios tienen más cabida en ella.
Tras escribir su primera novela, Olivia Sudjic se sintió expuesta, lo cual le generó, como era de esperar, bastante ansiedad. Decidió trasladarse a Bruselas a escribir su siguiente libro, un poco como vía de escape a esa exposición. Pero lo que ocurrió allí no estaba en sus planes. No sabía que allí iba a sentirse igualmente expuesta, que la ansiedad iba a apoderarse de ella y que esa nueva novela no avanzaría al ritmo que ella esperaba. Todo esto nos lo narra la autora en este ensayo titulado Expuesta, hilando, al mismo tiempo, sus lecturas de mujeres y sobre mujeres y realizando una brillante reflexión sobre la importancia de la mirada femenina en la literatura.
Como os he dicho al principio, no es el libro que esperaba encontrarme, pero si os soy sincera, me han gustado bastante las reflexiones de la autora en este ensayo tan personal, honesto y agudo.