¿Os imagináis a Arya Stark en el cuerpo de una ratona? Y no de una ratona cualquiera, sino de una princesa hámster que todos quieren que se comporte como tal. Con modales de princesa callada y obediente. ¡Madre mía! ¡No saben con quién han dado! Porque la protagonista de Hamster Princess y la maldición de la bruja ratona, de Ursula Vernon, es una hámster de armas tomar con las ideas muy claras. Una auténtica Arya del mundo ratonil. Pero antes de invadir la ratonera real de este cuento y sumergirnos en su historia, os contaré un secreto.
¿Sabéis cómo llamo yo a mi hija? Mi princesa ratona. Por ese motivo no pude resistirme cuando descubrí este libro. Mis ojos hicieron chiribitas al ver esa portada tan mona, tan colorida, y además, con purpurina. Si es que soy como una niña. Me apasionan los cuentos y los libros infantiles, y más cuando el argumento es tan sorprendente y divertido como el de esta historia.
Harriet de Hamsteria es una princesa muy particular. Prefiere las espadas a los vestidos. Y cuando se entera de que una maldición la condenó a quedarse dormida al pincharse con una rueda de hámster cuando cumpliera doce años, opta por ver el lado más positivo que pueda existir. ¡Será invencible hasta su decimosegundo cumpleaños! Podrá enfrentarse a dragones y monstruos sin miedo. La maldición la protegerá y la mantendrá viva hasta ese momento. ¿Hay algo más excitante que eso? El poder de la inmortalidad hasta los doce años.
Como habéis comprobado, así a priori parece una parodia de La bella durmiente con ratones. Pero no, es más que eso. Es cierto que sigue esa línea y la primera mitad del libro se asemeja mucho. Sin embargo, después de un momento clave en la historia —que no desvelaré, claro está—, da un giro inesperado convirtiendo el cuento en una versión encantadora, desenfadada y trepidante donde los monstruos pueden ser nuestros amigos, y las brujas y los gigantes son víctimas de niños malvados.
Además, algo que está muy presente es el humor entre página y página. Un humor irónico que nos acompaña en todo momento dándole mucha vida al cuento. Harriet responde como mejor le parece haciendo que nos riamos a carcajadas con todo lo que le ocurre a ella y a todo aquel que se cruza en su camino.
Por otro lado, tengo que decir que la combinación que trae este libro entre novela infantil y cómic me ha encantado. Las viñetas dan mucha agilidad al relato y eso hace que ni nosotros ni nuestros peques se cansen.
De esta forma, podemos pensar que ya que tenemos texto y dibujos, habrá dos personas detrás de la obra. El escritor y el ilustrador, ¿verdad? Pues… ¡sorpresa! Son la misma persona. Y es que Ursula Vernon, además de escribir, ilustra cada página del libro, demostrando así que tiene un gran talento.
Pero no quiero dejar de hablar de las ilustraciones. Tengo mis razones. ¿Pensáis que el color rosa iba a predominar en esta historia de ratona peleona? Rotundamente no. El protagonista en todas las viñetas es el morado. Y, ¿sabéis lo que hice? Busqué en Internet su significado y descubrí que tiene mucho sentido que la autora lo haya utilizado.
Este color es símbolo de la magia, la creatividad y el positivismo. Las personas que se identifican con él son independientes y disfrutan la vida al máximo. Así que, si metemos en el horno todos estos ingredientes, ¿quién nos sale? Nuestra princesa hámster, sin duda.
Por eso el morado es perfecto para Harriet, que tiene mucha personalidad y odia comportarse como una típica princesa de cuento. Porque, ¿quién ha dicho que las princesas no puedan pelear y vivir aventuras? ¿Por qué no pueden saltarse las normas establecidas y hacer lo que les apetezca?
Harriet de Hamsteria sí que puede, porque ella es una rebelde que ha venido para quedarse y ser el nuevo ídolo de los pequeños de la casa. Gracias a ella, nuestros hijos se divertirán mucho y aprenderán a ser ellos mismos sin miedo a nada.
En definitiva, Hamster Princess y la maldición de la bruja ratona es una nueva serie de primeras lecturas con una protagonista muy peluda, muy guerrera y muy justiciera. Es un cuento que nos demuestra que cada persona es libre de elegir su camino en la vida. Que de algo negativo podemos sacar algo muy positivo. Y que, ante todo, nunca debemos rendirnos.