Un coche sobrevolando las calles de Londres, una madriguera llena de objetos mágico, un alocado y simpático elfo, una cámara escondida en un famoso colegio de magia, una serpiente gigante que siembra el caos entre estudiantes y profesores… ¿Ante qué historia nos encontramos?
Para un apasionado del universo de Harry Potter siempre es especial volver a Hogwarts, volver a abrir un libro que te transportó a un mundo de magia y aventuras. Unas páginas que te sacaron más de una sonrisa y que te hicieron enamorarte de más de uno de sus personajes. Empezando por su protagonista y acabando por personajes secundarios como Luna Lovegood o Rubeus Hagrid.
Cuando comencé a leer esta saga, con tan solo diez años, no sabía todo lo que iba a significar para mí. No pensaba que un libro podía despertar en un lector tantos sentimientos a la vez. Pero así es. Harry Potter no es una saga de libros más, es una puerta hacia un mundo lleno de esperanza, ilusión y sueños. Pero esto no lo entiende todo el mundo, solo los seguidores más acérrimos soñamos con recibir nuestra carta de Hogwarts, una escoba modelo Nimbus (o, para los más guays, una saeta de fuego) y una varita con la que poder lanzar hechizos como el más valiente auror. Entre otras muchas cosas…
Por eso, cuando me enteré de que Salamandra iba a publicar en español las ediciones ilustradas de la saga, supe que tenía que leerlas. En el primer libro, Harry Potter y la piedra filosofal, me enamoré de las ilustraciones de Jim Kay. Es increíble el talento que tiene como ilustrador. Sus ilustraciones son modernas pero a la vez clásicas, por su realismo (la cantidad de detalles que dibuja es espectacular) y su uso del color. Me impresionó mucho a medida que lo iba leyendo. Y, de esta forma, me ha vuelto a impresionar en este segundo libro, Harry Potter y la cámara secreta, aunque de manera diferente. La personalidad de los personajes, así como los escenarios y los peligros a los que se enfrentan, están muy presentes y su interpretación de todo ello es muy original. Me sorprendió, sobre todo, cómo ha integrado todos los elementos oscuros que encontramos en la historia, entre ellos, lo que ocurre cuando Harry se encuentra en el callejón Knockturn, cuando encuentra el diario de Rom Riddle o cuando lucha con la serpiente en la cámara secreta.
Hay que reconocer que la labor de edición e ilustración de estos libros es ejemplar y propia de una edición de lujo de coleccionista. Pienso que, a medida que vaya ilustrando el resto de los libros, se irán superando cada vez más.
Harry Potter y la cámara secreta en edición ilustrada es un libro que todo seguidor de la saga debería leer. En mi caso, haber releído todas las aventuras que viven Harry, Ron y Hermione en esta edición ha sido muy especial y diferente y me ha llevado a experimentar, de nuevo, todo lo que sentí la primera vez que lo leí. Además, aleja al lector un poco de las películas e invita a usar de nuevo su imaginación para revivir la historia de un modo diferente. En definitiva, me ha encantado volver a este mágico universo a través de esta maravillosa edición. Ahora os toca a vosotros…
La cámara de los secretos ha sido abierta. Enemigos del heredero, temed.