Reseña del libro “Havenfall: Los cuatro reinos”, de Sarah Holland
Marginada. Rara. Grotesca. Así te ve la gente, pero tú no has hecho nada para merecer esos adjetivos. Solo eres una adolescente cuya madre fue acusada de asesinato y sentenciada a muerte. ¿La víctima? Tu hermano. Pero tú sabes lo que viste. Y tu madre no mató a tu hermano. Fue aquel monstruo, aquella criatura venida de otro mundo. Sin embargo, nadie te va a creer. Si hablas te tacharán de loca, o mejor, te creerán aquellos que vienen de otros reinos y la estabilidad que tu tío y tus ancestros han conseguido con la Posada, no habrá servido de nada. El pacto entre los tres reinos de Byrn, Fiordenkill y Haven se irá al garete. Hay monstruos en nuestro mundo. Monstruos con forma humana infiltrados entre nosotros. Pero nadie debe saberlo porque entonces tu futuro como posadera, como mediadora por la paz entre reinos que se ha conseguido hasta el momento, se desvanecerá. Tú, Maddie Morrow, solo eres feliz, solo eres tú misma en ese lugar. Solo eres libre en Havenfall.
¿Qué os parece la premisa de la que parte el primer tomo de la nueva bilogía de Sarah Holland? A mí me pareció brutal. Y más después de haber leído a esta autora en Everless, libro que devoré y disfruté muchísimo hace unos años, ya que Sarah siempre nos ofrece fantasía en estado puro con sistemas de magia muy originales y dosis justas de miedo. Así que no podía dejar pasar este nuevo comienzo de bilogía.
Havenfall: Los cuatro reinos me ha resultado un libro perfectamente estructurado, ya que al principio de la novela encontramos una introducción muy necesaria y explicativa sobre los Reinos Contiguos: Fiordenkill, Byrn, Solaria, Haven y la mismísima Posada de Havenfall, un lugar de paz, la unión donde todos los reinos convergen. Gracias a ese apartado introductorio, el lector se adentra en la historia totalmente preparado para no perderse entre términos y mundos.
Por si esto fuera poco, el hecho de tener una narradora en primera persona, la propia Maddie, hace que todo sea más fácil, que todo lo contemplemos a través de sus ojos y de su perspectiva, cosa algo limitada en algunos momentos pero muy necesaria para el desarrollo de la historia. De esta forma, el lector va descubriendo misterios, verdades y secretos al mismo tiempo que nuestra protagonista.
Otro detalle que me ha gustado mucho es que Sarah Holland crea una atmósfera de tensión desde el comienzo. Quizás podría habernos presentado a Maddie ya en el interior de la Posada con su tío Marcus y demás personajes pintorescos, pero no. La autora nos hace testigos de su vida fuera de Havenfall, de su viaje hacia su hogar y de la incertidumbre que le genera lo que va a ocurrir allí, si todo permanece igual que años anteriores o no.
Además, una vez que nos metemos en el meollo, todo es un no parar de intrigas, secretos y personajes misteriosos. Hay varios frentes abiertos que Maddie deberá encarar y que la empujarán a actuar con gran responsabilidad o morir en el intento. Porque precisamente esta novela, a pesar de mostrarnos un mundo humano como el nuestro y otros reinos mágicos, también nos habla del duro paso de la adolescencia a la edad adulta, de la marginación y de los prejuicios de la sociedad hacia los jóvenes de familias desestructuradas. Nos enseña cómo cuando estamos perdidos podemos hallar nuestro lugar en el sitio más inesperado. Nos anima a ser fuertes y a tomar decisiones difíciles en los momentos más duros, a encontrar nuestro sitio en el mundo y, por supuesto, nos abre portales mágicos a otros universos que nunca pensamos podrían existir. Así, este primer volumen de bilogía nos da esperanzas y nos incita a luchar por aquello y aquellos a los que más queremos, a hacer justicia, a tener el poder de lograrlo y nunca desistir.
En resumen, no podéis perderos Havenfall: Los cuatro reinos porque como habéis visto, toca temas muy importantes hoy en día sobre la familia, la madurez y las injusticias sociales. Además, también hallamos personajes LGTBI que son importantes en la trama. Todo esto dentro de una ambientación magnífica de fantasía y mundos mágicos tan atrayentes como terroríficos.
Debo decir también que Havenfall es un libro no demasiado extenso para ser de género fantástico, con romance en su justa medida y descripciones precisas que nos ayudan a seguir el hilo de la historia aumentando nuestras ganas de descubrir los misterios que rodean a la Posada, a los reinos y a los personajes con los que nos vamos topando según vamos avanzando.
Así que espero que Puck no tarde mucho en traernos la segunda y última parte de esta bilogía, ya que los últimos capítulos de este primer tomo tienen varios giros sorprendentes que me dejaron estupefacta ansiando conocer el desenlace.