Reseña del libro “Heroínas sencillas y perversas”, de Emily M. Danforth
Las avispas siempre me han dado pánico. Quizás porque nunca me han picado. Quizás porque he visto demasiadas películas en las que la gente moría por anafilaxia.
El caso es que las avispas que vuelan alrededor de nuestras protagonistas en el libro que hoy os traigo, son de todo menos simpáticas —¡qué tontería! ¡No hay avispas simpáticas! ¡No son la abeja Maya, narices! —. Heroínas sencillas y perversas, de Emily M. Danforth, es una abrumadora novela llena de originalidad, de oscuridad y complejidad, con protagonistas reales con personalidades muy definidas, giros y distintas líneas temporales que os volverán locos desde el comienzo, sí, y habrá momentos en los que toda la información conseguirá que os explote la cabeza también. Querréis desistir y mandar el libro a lo más hondo del avispero donde habitan las terribles chaquetas amarillas —sí, esas avispas dichosas que marcarán el destino de las protagonistas—, pero yo os digo: ¡aguantad! ¡Sed fuertes! La novela merece la pena y os sorprenderá muchísimo.
Seré breve: Flo y Clara, dos chicas que se aman la una a la otra en 1902. Las chicas asisten a la escuela Brookhants. Las chicas adoran a la escritora Mary McLane. Las chicas mueren en un bosque atacadas por avispas. Más de un siglo después, otras dos chicas, una superestrella del cine homosexual, Harper Harper, y una actriz de serie B, Audrey Wells, interpretarán a nuestras chicas en la gran pantalla siguiendo la obra de la escritora Merritt Emmons.
Por supuesto, nada va a salir bien en un momento donde pasado y presente se fusionan y ficción y realidad se entrelazan de la forma más cruel y tenebrosa que os podáis imaginar.
Dicho esto, debo resaltar lo mucho que me ha gustado el narrador. Siempre sarcástico, directo, terrorífico a veces y divertido otras muchas. Y siempre manteniendo el misterio de quién está detrás de esa voz. Siempre tan cercano con el lector como si de esa amiga cotilla y exasperante a la que no vemos desde hace tiempo se tratase. Además, las notas a pie de página son muy originales y continuamente invitan al lector a participar en la historia, a retener datos y a actuar como detective.
Otra de las cosas que más me ha sorprendido y gustado ha sido la importancia y naturalidad con la que se trata el tema del lesbianismo. Y es que es así, y siempre debería ser así. ¿Qué hay de malo en que dos mujeres se amen? ¿Qué hay de raro en el mero hecho de querer a otra persona? Da igual si es hombre o mujer. Sin embargo, pocas lesbianas he encontrado yo en las novelas que he leído, por lo que aplaudo a Emily M. Danforth y agradezco que nos haya regalado a los lectores una historia como esta, con representación LGTBI, con fantasía oscura, con diferentes líneas temporales y unos personajes realmente fascinantes.
Sí, las protagonistas son todas excepcionales y me han llegado al corazón, sobre todo Harper Harper, su forma de ver la vida, de actuar y todo lo que la rodea, su pasado y su presente.
Y ya por último, no me puedo olvidar de las lúgubres y hermosas ilustraciones de Sara Lautman tan acordes con la historia y con cada fragmento.
Así que, solo me queda deciros que Heroínas sencillas y perversas es un libro que debéis leer para estas fechas porque es ideal por su temática tenebrosa y rebuscada —al estilo de las películas de M. Night Shyamalan quizás—, y encima conseguirá que os perdáis entre sus enredadas y complejas páginas donde nada tiene sentido hasta que lo tiene, y entonces todo estallará en vuestros cerebros.