Historia de dos ciudades, de Charles Dickens
Eso sí, si se deciden a leer Historia de dos ciudades recuerden que pueden encontrar este inicio escrito de diversas formas, depende de las traducciones, pero deben entender lo que leen, y de no ser así deben abandonar esa lectura, ya que he descubierto que hay muchas traducciones realmente intragables, (en otro tiempo habría dicho “infumables”), de esta obra.
Fundamentalmente la de los pobres, claro, y si quieren que les diga la verdad, no diría yo que eso haya cambiado mucho, esos fueron tiempos en que un pueblo decidió decir ¡Basta ya!
Pero volvamos a nuestra novela en la que conoceremos al doctor Alexandre Manette, un hombre solidario y honesto que ha pasado dieciocho años en una cárcel de Paris en unas condiciones tan lamentables que ha llegado a perder la razón, ni tan siquiera recuerda el motivo por el que fue llevado a prisión.
Regresará a Londres donde con los cuidados de su hija le harán recuperar su salud y equilibrio mental. Por diversos motivos deberá regresar a París justo en el Inicio de la Revolución Francesa donde veremos como Dickens reflexiona e intenta determinar la responsabilidad que tuvo en su estallido cada clase social pero también pone de manifiesto los excesos de la propia Revolución.
El humor, la ironía y la paradoja tan constantes en todos sus libros también los encontraremos en Historia de dos ciudades, y para no olvidarnos de ese sentimentalismo tan peculiar en él, y que tanto disgustaba a mi querida Virginia Woolf, nos recordará que dar la vida por los demás es el máximo gesto de generosidad, que el sacrificio siempre tiene su recompensa, aunque esas recompensas lleguen, ya saben… En la otra vida.
Susana Hernández
Jajajaja, veo que vas adaptando el lenguaje, presiento que vas a ser una ex de lo más nostálgica, jajaja
No me desagrada nada leer un libro de los movimientos de aquella época y que tan bien nos vino, explicado por un escritor de aquellos tiempos. Así como realmente no sabía de qué iba Historia de dos ciudades, pues nada, me lo llevo para mi biblioteca 😀
Valoro que el escritor también hiciera referencias a los excesos, porque eso me hace pensar que no es como en los cuentos que no reflejan la complejidad de la realidad, en la que movimiéntos globales que pueden ser buenos, a nivel celular pueden haber muchas imperfecciones, y horrores que conviene no olvidar.
Un abrazo
Ya sabes como es la vida amiga “adaptarse o morir” jejejeje
Me alegra que te lleves el libro, y espero que te guste la forma en la que el autor relata los muchos excesos en aquellos días de revolución… Creo que esas cosas han pasado siempre en las revoluciones aunque siempre se recuerden o rememoren de forma idílica.
Un besico, y gracias por tu comentario!
Un buen libro. Sí, dar la vida por los demás. Y hoy se siguen dando hechos de ese tipo y por desgracia, de los otros, de los excesos de los que hablas.
Cómo me alegra que vengas a compartir eso mismo con todos nosotros!!! Seguro que animamos a alguien más a acercarse a esta estupenda novela
Besicos!