Reseña del libro “Una casa en el mar más azul”, de TJ Klune
Linus Baker es funcionario en el Departamento Encargado de los Jóvenes Mágicos, el DEJOMA, sus días discurren bajo la misma sombra gris, pero él no espera más de la vida, con su trabajo, sus discos, su butaca, su gata Calíope y los girasoles que brotan en su jardín aportando el único toque de color que tiñe su vida tiene más que suficiente, o al menos eso se repite a sí mismo. Hacía mucho tiempo que se había resignado a la idea de que él era más gris que los demás, como si el mundo fuera un lugar de colores vividos y cristalinos y él apareciera desdibujado, sin encontrar su lugar en el mundo.
Pero si hay algo que distingue a Linus de los demás es lo escrupuloso que es con respecto a su trabajo, sigue con el máximo rigor todo lo establecido en el libro Normas y Reglamentos, con el fin de ser lo más objetivo posible en todos sus casos y mantener siempre una perspectiva objetiva sobre los niños mágicos de los orfanatos que él supervisa. Precisamente por eso, por lo preciso y discreto que es en su trabajo, Altísima Dirección le encomienda la que será la misión más importante de su vida: debe supervisar un orfanato del que apenas hay registros, está tarea está catalogada con un nivel cuatro de secretismo, y no es para menos, pues en la isla de Marsyas donde se halla el orfanato, residen seis huérfanos muy peligrosos, entre ellos se encuentra el futuro Anticristo y una gnoma hembra especializada en manifestar las amenazas más espeluznantes, después de oírla nunca os imaginaríais los distintos usos, a cual más truculento, que se puede dar a una pala.
La casa en el mar más azul es una de esas novelas donde me quedaría a vivir para siempre, a la que tengo claro que regresare en más de una ocasión por lo cálida, bonita, divertida y necesaria que es. Esta es una novela de personajes y de evolución, no posee una trama muy elaborada pero lo importante aquí son los personajes que habitan sus páginas, como unos complementan a otros y como se influyen sin apenas darse cuenta y van transformándose los unos a los otros.
Nuestro Protagonista Linus Baker es un hombre gris, tal y como él mismo se describe, vive dentro de un mundo que le resulta confortable, tedioso sí, pero manejable, es algo que conoce y hastía al mismo tiempo y aunque siempre ha anhelado algo más nunca se ha atrevido a iniciar el cambio, pero a veces, resulta que <<lo gracioso de los deseos, es que, en ocasiones, para hacerlos realidad, basta con dar un primer paso>>, y el primer paso del Señor Baker será iniciar una investigación en la isla de Marsyas y comenzar a derribar poco a poco todos y cada uno de los prejuicios que le habitaban, y es que, debemos entender al Señor Baker, primero porque todos juzgamos y en menor o mayor medida tenemos prejuicios, tenéis que ser muy sinceros ¿cómo os sentiríais vosotros al conocer al futuro Anticristo? Algo de recelo sí que sentiríais, ¿verdad? En gran parte por todo lo que la sociedad, la historia y las películas de miedo nos han inculcado, pero os sorprenderíais al igual que Linus, al conocer a un niño con un sentido del humor muy negro, al que le encanta la música, con una facilidad pasmosa para la dialéctica y al que le acechan unas pesadillas terribles por las noches a las que logra sobreponerse por no lastimar a nadie. Lo mismo os ocurriría con Chauncey, cuyo aspecto siempre lo ha definido, por eso está convencido de que es un monstruo de esos que se esconden en la oscuridad de debajo de nuestras camas para atacarnos cuando menos los esperamos.
TJ Klune nos brinda en La Casa en el mar más azul una obra cálida que nos habla sobre la importancia de la aceptación, de ver a las personas que tenemos delante sintiéndonos libres, libres de prejuicios, libres de juicios para conocer a los otros desde la verdad, desde lo que son. Pero qué difícil resulta algo tan simple cuando muchas veces los prejuicios no nacen de nosotros sino de lo impuesto, de la sociedad, del miedo inculcado y trasladado, ese miedo a lo desconocido que nubla la visión. TJ Klune reivindica la diversidad, la inclusión y los derechos de la infancia y lo hace a través de una trama llena de ternura, de momentos divertidísimos y diálogos inteligentes, promoviendo reflexiones sobre lo que es moral o inmoral, sobre el peso que tiene lo innato frente al entorno, el contexto y la educación.
Como os comentaba al principio este es un libro de personajes, en todos ellos, observamos una gran evolución, la forma en la que se convierten en familia, en que se dan cuenta de que todos tienen una suerte de ideas preconcebidas que no se corresponden con la realidad y de cómo encuentran su lugar en el mundo, un lugar en el que todo lo que ocurre es alivio, es calma y es casa, es un abrazo imperfecto a veces pero que te hace sentir seguro y te da raíces y pertenencia, ese lugar para Linus Baker es Una casa en el mar más azul.
Hace mucho tiempo que tenía ganas de leer a TJ Klune, es un autor conocido por la representación LGBTQ+ en sus novelas de género fantástico, estoy segura de que este es el primero de muchos libros suyos que leeré y también lo estoy de que regresaré a Marsyas porque el autor ha creado un lugar con corazón, tierno, divertido y entrañable, ha conseguido erigir uno de mis lugares en el mundo al que me gustaría volver porque el amor debería ser siempre obligatorio y la sensibilidad también.
<<El cambio comienza cuando unos pocos hacen oír su voz>>