Cuando tienes hijos, una de las cosas que más te preocupan es la comida y que coman bien, porque una alimentación saludable es fundamental para su desarrollo y crecimiento. Sin embargo, aunque podamos encontrar libros que nos recomienden y aconsejen las mejores recetas y los alimentos más adecuados para ellos, estos suelen estar enfocados a los adultos, a los padres.
Pero, ¿y si hubiera un libro sobre alimentos naturales, ricos y sanos, dirigido a los más pequeños de la casa? Totalmente volcado en ellos, por y para ellos, mostrándoles un mundo mágico y hermoso donde la naturaleza y lo que nos proporciona son los protagonistas. Porque la naturaleza y sus frutos son cosas importantes y necesarias para nuestro bienestar.
De este modo, si ellos mismos conocen de primera mano, de manera divertida y entretenida, ese reino de cosas deliciosas, conseguiremos que se conviertan en amantes del medio ambiente y de la comida sana y saludable.
La Casita de Madera es ese libro. Un conjunto de ocho cuentos escritos por la nutricionista y dietista Carla Zaplana. Cuentos que conectan a los más pequeños de la casa con la naturaleza.
El libro tiene una portada realmente preciosa que hizo que me sintiera atraída por él irremediablemente desde el inicio. Una portada con una mamá y una niña contentas junto a una casita de madera, entre flores y frutas, y todo lo que las rodea brilla intensamente porque la naturaleza es vida. ¿Qué más se puede pedir? En mi opinión, ya solo por esa portada, que nos transmite paz y armonía, estabilidad y tranquilidad, merece que le demos una oportunidad.
¿Y su contenido? ¿Qué encontramos dentro? Bueno, como he dicho antes, en el interior tenemos ocho cuentos hermosos y repletos de luz que se cuelan en nuestra vida para que aprendamos a ser felices y a hacer felices a nuestros hijos a través de una mente sana en cuerpo sano.
Además, algo que me ha encantado y creo que es ideal es que al final de cada cuento siempre hay un juego, receta o manualidad que motivará a los pequeñajos a que se impliquen, a que participen y demuestren lo que han aprendido en esa historia y así la sientan más suya.
Las historias son fragmentos del día a día de Cali, la protagonista, una niña intrépida a la que le gusta jugar con su perrita y pasárselo bien en el jardín de la Casita de Madera de sus abuelos. Un lugar, este jardín, que le permite ser ella misma y estar en sintonía con las plantas, el huerto, los árboles y sus frutos. Porque las actividades tan bonitas, sencillas y esenciales que se pueden llevar a cabo allí, son la chispa de la vida, lo que nos hace sonreír y olvidar los problemas.
Y lo más bonito, lo más auténtico, es que el libro está inspirado en la infancia de la autora, porque ella es esa Cali que pasaba los veranos en la casa de sus abuelos, donde respiraba aire puro, donde se encontraba a gusto.
Es conmovedor que Carla nos deje ver en estas historias ese pedacito de ella misma. En cada uno de los ocho cuentos encontramos una aventura ligada a ella, a los momentos que vivió y lo que aprendió de ellos. Cuentos que cobran vida gracias a Màriam Ben-Arab, que nos transporta a ese mundo mágico con sus coloridas ilustraciones. Tan hermosas que casi traspasan las páginas para invitarnos a entrar en ese jardín y en esa casita de madera. Para que nos demos cuenta de lo sencillo que es ser feliz, que no hacen falta golosinas, comida basura, móviles, ordenadores, televisión, ropa cara ni grandes sumas de dinero. Solo concienciarnos de las maravillas que tenemos a nuestro alrededor.
Para mí, conocer a Carla Zaplana de esta manera tan especial, a través de La Casita de Madera, ha sido una experiencia bonita y gratificadora. El mensaje que me llevo es claro y natural, un mensaje de amor y amistad. Un mensaje que nos muestra el camino hacia la felicidad.
Por eso considero que debería haber más libros como estos en el mercado que nos hagan más fácil la vida a los padres y a los hijos, que nos ayuden a enseñar a los peques lo importante que es el agua para los seres vivos y para el mundo, los beneficios del yoga para niños, lo bonita que es la naturaleza y todo lo que podemos lograr si le abrimos nuestros brazos, nuestra mente y nuestro corazón sacando así todo lo malo que pueda haber en nosotros y dejando entrar a lo bueno de verdad.