La hermandad del honor, de Jorge Fernández Díaz
Era un día más en mi rutina diaria. Estaba sentada en el colectivo (bus), viajando desde la universidad. Tenía un asiento y también un libro nuevo: La hermandad del honor. Tomé el señalador y comencé a leer desde la página que había dejado. Este era un libro de relatos, de personajes a primera vista comunes, pero que guardan historias memorables. El relato que me tocaba leer era conmovedor: un hombre buscaba con desesperación a sus hijos. La madre se los había llevado y no los había visto nunca más. Leí cada palabra con atención y, mientras las líneas pasaban, era imposible desconectarse. La historia llegó a su fin y se me cayó una lágrima. Una sola bastó para que me sintiese conmovida.
La hermandad del honor es un libro que transmite mucho más que estas 35 historias particulares. Historias que cuenta el periodista Jorge Fernández Díaz junto con los protagonistas. Estas personas tienen una vida que vale la pena ser contada y que atrapan al lector en cada momento. Un cura que trabaja en barrios pobres, otro sacerdote que hace exorcismos, una médica que estuvo presente en la tragedia del 11 de septiembre, el custodio de un presidente, el trabajo de un detective privado, entre otras. Todos ellos guardan una experiencia distinta, que los modificó como profesionales y como personas.
Vivimos en una sociedad que avanza y no se detiene, donde todo parece volátil e impersonal. Es por eso difícil de creer que en esa misma comunidad existen personajes que trabajan desde su lugar y conforman una vida a través de un sacrificio diario. La tapa del libro propone historias relacionadas a la vida y al destino. Y no defrauda.
Siempre que se lee un libro es necesario que guste la manera particular de escribir que tiene el autor. Este escritor es para mí un lugar seguro, pues encuentro en su estilo lo que busco. Es claro y sabe darle la cuota necesaria de literatura a sus textos. No aburre con largas descripciones sin sentido ni utiliza palabras intrincadas cuando ni siquiera son necesarias. Fernández Díaz tiene la máquina codiciada por cualquier buen autor: la máquina de crear climas literarios ¿Cuáles son los ingredientes que utiliza ese aparato? Pocos deben saberlo. La realidad: este escritor es un experto en armar situaciones.
¿Opinión? Es difícil ser crítica con un libro que me hizo emocionar. Confieso que cuando lloré en aquel asiento, miré rápido a mi alrededor esperando alguna mirada de desconfianza entre los pasajeros. Es posible que alguno de ellos también tuviera una historia para contar, tan asombrosa, misteriosa y contundente como las que aparecen en el libro. Personas a las que Fernández Díaz podría entrevistar.
Georgina Marrapodi
Que buena reseña, y que buena pinta tiene este libro!
Lo cierto es que no he leído nada de este autor, pero gracias a tu reseña me pondré a ello ya.
Un abrazo!
No soy afín a la recopilación de historias/cuentos por una cuestión de que tengo que seguir una única trama en el libro.
Pero no dudo de que la pluma de Fernández Díaz hace que el libro valga la pena.
Quizás deba darle una oportunidad y abandonar mi rechazo tan sólo porque hablamos de este autor.
Muy buena reseña!
Susana: Gracias! No te vas a arrepentir de leerlo, es muy talentoso. Saludos!!
Rose: Muchas gracias. Si algún día querés arriesgarte es una buena opción!!