La librería encantada, de Christopher Morley
Título: La librería encantada
Autor: Christopher Morley
Traducción: Juan Sebastián Cárdenas
Editorial: Periférica
Páginas: 320
ISBN 9788492865703
Al formar parte del Jurado de Selección del Concurso de Reseñas del año pasado de LibrosyLiteratura, tuve la ocasión de leer estupendas reseñas sobre un libro titulado “La librería ambulante”, me quedé con el título y con el nombre del autor, Christopher Morley. Pero son muchas las lecturas que siempre hay sobre mi mesa y por un motivo o por otro, y aun cuando el título quedó en mi memoria, he de confesar que luego ni me he hecho con un ejemplar, ni hubiese dispuesto del tiempo suficiente para leerlo. O quizá sí.
Pero… (Porque todo en esta vida tiene un pero), llegó mi amigo el farmacéutico, del que tantas veces les he hablado, puso en mis manos un ejemplar de La librería encantada, y me di cuenta enseguida que uno y otro estaban relacionados ¡Claro, el autor, Christopher Morley, es el mismo!
Como les decía, no he leído el anterior, pero les puedo garantizar que podrán leerlos de forma independiente, de hecho, estoy segura de que yo leeré el anterior un poco más adelante.
De alguna manera será como profundizar en la vida de mis nuevos y entrañables amigos, Roger y Helen Mifflin, pues sé que un día se dedicaron a recorrer las zonas rurales de Estados Unidos con su librería ambulante, pero de lo que aquí se habla es ya de su asentamiento e instalación en Brooklyn. Y, desde luego, hablar de este barrio de Nueva York, es hablar de librerías y de literatura, pero sin olvidar que este libro está escrito en 1919. Imposible que el Sr. Mifflin, pudiese conocer a nuestro querido Auster…
Veamos, puedo contarles que mis nuevos amigos son unos peculiares personajes que regentan La Librería Encantada, una librería hoy imposible, imposible, imposible imaginarla, por muchos motivos; el primero, el tabaco, casi les diría que es obligatorio el humo, y lo entiendo, recuerdo cuando yo para escribir y leer debía tener en mi mano esa máquina de humo y ceniza. Segundo, es imposible que alguien mantenga abierta una librería de segunda o primera mano, solo por amor a la literatura… La vida es mucho más dura que todo eso. Y tercero, y por no alargarlo más, tener una librería con los mejores libros de la historia, lo mejor de lo mejor, lo más selecto… Eso no es fácil, porque ¿Qué libros debería tener? Seguro que siempre habrá quien dirá que falta uno y quien dirá que sobran cinco. Y ahí entramos en el lío de la calidad literaria, y muchas, buenas y acertadas serán las respuestas que podemos encontrar en este libro.
En esta Librería encantada, o soñado parnaso, acuden diferentes personajes con los que hablaremos de literatura, de libros, de publicidad, de la importancia de la figura del librero, y del horror que tienen algunos libreros por las bibliotecas (jajaja). ¿Les gusta hablar de estos temas? A mí sí, y me ha divertido la forma de ver la vida que tienen estas buenas gentes, que como no pueden leer todos los libros, como casi nadie, leen un poco de cada cosa y con eso deben ser capaces de ofrecer a sus clientes un libro que les asegure un alto grado de satisfacción.
Hay trama, pasan cosas, es divertido y habla de exquisita literatura de antes de 1919, ¡claro! Nadie debe esperar que se hable de libros que aun no se habían escrito ni publicado.
Verán, empecé el libro y ya, en la página veinte escribí, en el propio margen del libro, (porque sabía que no lo devolvería), “solo por estas veinte páginas, ya merece la pena haber escrito, publicado y leído este libro”.
El propio Sr. Mifflin tiene un cuadro colgado que contiene una carta publicada en su día en una revista que relata con mucha gracia cual debe ser la ética en relación a los libros prestados:
“Agradezco humilde y sinceramente la devolución de este libro que, tras sobrevivir a la biblioteca de mi amigo y de las bibliotecas de los amigos de mi amigo, regresa ahora a mí, sano y salvo, en condiciones razonablemente aceptables.
Agradezco humilde y sinceramente a mi amigo que no diera este libro a su hijo como si fuera un juguete ni lo usara como cenicero para sus puros, ni para afilar los dientes a su mastín.
Cuando presté este libro lo dí por perdido, me resigné a la amargura de verlo partir para siempre, nunca pensé que volvería a ver sus páginas.
¡Pero ahora que mi libro me ha sido devuelto, me siento pletórico de regocijo y gratitud! Traedme aquí al gordo marroquinero para reencuadernar el volumen y ponerlo en su lugar de honor en mis estanterías: Pues mi libro prestado me ha sido devuelto.
Ahora, por lo tanto, tendré que devolver algunos de los libros que yo mismo he tomado prestados”.
¿Qué más les puedo decir? Que se acerquen a este libro y a este autor
Susana Hernández
A mí me ha pasado como a tí, que se me quedó el de La librería ambulante. Vi este que traes hoy en una librería a juego con el título de tu libro, en Santiago de Compostela, y casi cedo a la tentación, pero resistí con la excuda de que antes tendría que leer el primero. Las dos portadas encima me encantan: estos abuelitos encantadores, no nos inportaría este futiro, ¿verdad? Jajaja.
Bueno, pues ya veo que podía haber pecado, que se pueden leer tranquilamente independientes. Así que te haré caso, y como disfruto escuchando hablar de libros, y bueno, que se centre más en los clásicos, por estar desarrollado en 1919, pues viene bien, me hacen los deberes, y traen a los libros suoervivientes, jeje. No me importan esos filtros 😛
Un abrazo
Qué pareciditas comos, amiga!!!! jejeje
Este es un libro para gente como tú, como todos aquellos que buscan libros que llevan a libros, para gente que le gusta hablar de libros, y de la filosofía de la lectura, que es literatura y que no lo es… Esas conversaciones eternas al calor de un hogar calido con unas patatillas en la lumbre para comerlas luego con sal y aceite jajaj no es solo una forma de hablar, es que también se habla un poco de cocina jejejej
En otro viajecito a Santiago que lo veas… ¡A por el! 😛
Besicos !
Tengo los dos libros apuntados desde hace… Ni lo recuerdo… Si es que hay tantas tentaciones que es imposible leerlas todas… Pero estos libros tienen que caer sí o sí!!
Besotes!!!
Algún día los leerás porque creo que son libros para gente “rara” y apasionadas lectoras como nosotras jejejeje
Besicos!
Hola Susana, ya vi este libro en alguna reseña en algún otro lugar del mundo y con muy buenas críticas. Son tantos los libros interesantes para leer. Me lo voy a apuntar, por que nunca se sabe…Un saludo guapa
Es cierto, son muchos… Pero siempre es bueno quedarte con una referencia, porque tambien puede ser que a lo largo de la vida título o autor se crucen en tu camino 😛
Me ha alegrado leerte por estos lares. Un abrazo!