Reseña del libro “La sabiduría del no saber: actualizar los conocimientos que cambiarán nuestra vida”, de Antonio Lozano Domenech
¿Crees que sabes cómo funciona el mundo? ¿Y si te dijera que este libro ha llegado para demostrarte que en realidad no sabes prácticamente nada? ¿Que todo (o casi todo) lo que creías saber es incorrecto o está obsoleto?
Pues de eso precisamente viene a hablarnos Antonio Lozano, con su libro “La sabiduría del no saber: Actualizar los conocimientos que cambiarán nuestra vida”. Este autor, en poco más de 150 páginas conseguirá que te replantees cosas que hasta la fecha dabas por sentadas.
“¿Por qué tengo este temperamento, este carácter y esta personalidad? ¿Por qué profeso esta ideología política? ¿Por qué abrazo estas creencias y no otras?”
El libro está divido en cuatro secciones principales, que abarcan los cuatro ámbitos en los que va a dejar nuestra vida patas arriba. Y antes de empezar a hablar de cada uno de ellos me gustaría destacar una cosa que me ha gustado especialmente: al final de cada capítulo viene una especie de mini resumen con algunos de los datos y conceptos más importantes, lo que ayuda a ordenar un poco las ideas después de la avalancha de datos y cifras.
Dicho esto, vamos al lío.
En primer lugar, el autor nos habla de la realidad física. En este capítulo se da un repaso a todo el universo, desde las partículas que componen la materia hasta la Vía Láctea, pasando por la composición de la Tierra, el cuerpo humano, toda la información que desconocemos sobre el agua… De verdad que conforme iba leyendo mi cerebro empezaba a fallar. ¿Cómo es que nunca había pensado antes en todas estas cosas? Porque además todo el contenido del libro viene apoyado por datos científicos, estudios…
“Vacío y nada no son lo mismo. La nada es un concepto que se refiere a la ausencia total del contenido que debería existir en un continente. El vacío hace referencia a la ausencia de masa, pero está lleno de protones, electrones, neutrones, fotones, neutrinos y otros tipos de partículas y antipartículas subatómicas que aparecen y desaparecen autoliquidándose.”
El segundo capítulo del libro viene a hablarnos de la realidad social. ¿Existe una realidad social objetiva o todo depende de la percepción de quien la observa? Está claro que cada quien juzga las cosas de acuerdo a sus experiencias personales, la objetividad es un concepto puramente utópico más allá del campo científico, pero no es solo esto lo que descubriremos en este capítulo. También hablaremos de medios de comunicación, de redes sociales, de guerras, de las diferentes teorías de la evolución, de por qué es más probable que “la ley del más fuerte” no sea la teoría correcta, y de por qué sería más acertado decir que los organismos que sobreviven son aquellos que colaboran.
“La realidad social en la que vivimos y a la que juzgamos es una creación humana y está cargada de percepciones personales aprendidas en la socialización.”
En tercer lugar se encuentra el capítulo más breve de todo el libro, y es el que nos habla de la realidad económica. De este fragmento solo voy a mencionar rápidamente el tema tratado que más me ha llamado la atención: las inteligencias artificiales, su impacto en el mercado laboral y el pronostico que suponen a medio y largo plazo para los puestos de trabajo.
Para mí el cuarto capítulo ha resultado especialmente interesante, puesto que habla de la realidad individual. Aquí se tratan temas con la existencia del libre albedrío, de donde sacamos las ideas que se nos ocurren y, mi favorito, por qué los seres humanos no somos seres racionales.
Sí, has leído bien, no somos seres racionales. Somos seres emocionales.
¿Decidimos tener hijos de manera racional o emocional? ¿Y con quién casarnos? ¿Y nuestra profesión?
Si estas preguntas te están recolocando las conexiones cerebrales como me ha ocurrido a mí al leer el libro, sin duda te recomiendo que le eches un vistazo, porque después de leerlo es muy complicado que sigas siendo la misma persona. Serás una más sabia, y probablemente con más dudas sobre la vida, el universo y todo lo que te rodea. Pero no saldrás de este libro igual que entraste.