Hoy voy a hablar de La vida mola, un libro que va sobre running, pero vaya por delante que no soy runner. ¿Por qué me interesa este libro, entonces? Porque soy pareja de un runner y, claro, eso tiene sus consecuencias. La principal ha sido hacerme adicta a Maraton Man, el programa de Raúl Gómez, el autor de este libro.
Yo ya conocía a Raúl Gómez de anteriores formatos. Había visto sus primeros pinitos en TNT y Caiga quien caiga, y sus locuras en Otra movida, pero verlo en Maraton Man ha sido un gran descubrimiento. No exagero si digo que es el programa que más veces hemos recomendado mi pareja y yo, tanto a corredores como a no corredores, y de eso tiene mucha culpa el presentador. El running solo es la excusa para viajar por el mundo y contarnos historias inspiradoras.
Kenia, Inglaterra, EE. UU., Noruega, los Andes argentinos, México, Italia, Japón, Francia, India, Jordania, Cuba, Nepal, Costa Rica, Marruecos, Etiopía, Perú, Tailandia, Israel, Portugal, Zimbabue y Rumanía son los países que Raúl Gómez ha visitado para enfrentarse a retos deportivos de lo más variopintos y exigentes, además de hacer alguna que otra escala por carreras de España (Sevilla, San Sebastián, Pirineos e islas Canarias). Pero nos muestra esos lugares desde una perspectiva cercana y comprometida. Igual se sienta a comer con una familia de hopis que con el sabio de una tribu ancestral.
Quienes sean seguidores del Maraton Man ya sabrán que La vida mola es una frase que Raúl Gómez dijo espontáneamente en uno de los episodios, pero que ha acabado convirtiéndose en el lema del programa. Y no había mejor título para el libro autobiográfico que ha publicado, en el que nos confiesa cada uno de los muros que ha tenido que superar en la carrera de su vida. Cada vez que lloraba en el programa, yo entreveía que había algo muy personal detrás de esas lágrimas, y la verdad es que conocer los motivos me ha emocionado. Al igual que los protagonistas de los episodios de Maraton Man, Raúl Gómez es un ejemplo de superación y de ganas de vivir.
Además de abrirnos su corazón en las páginas de La vida mola, Raúl Gómez nos cuenta qué se esconde en las bambalinas de Maraton Man: cómo surgió la idea, cómo se organiza un programa de esa envergadura, cómo se prepara físicamente para aguantar… Y recuerda los momentos más emocionantes que ha vivido a lo largo de las cuatro temporadas. Aunque, como hay tantos grandes momentos, yo he echado en falta más de uno.
La vida mola es Raúl Gómez en estado puro. Un libro sencillo, divertido y optimista que encantará a los fans de Maraton Man. Quienes lo lean porque sí, sin haberse cruzado jamás con el programa, acabarán viéndolo, estoy segura. Y haciéndose adictos como yo, aviso. Y es que Maraton Man es un programazo y Raúl Gómez, un loco que nos contagia su optimismo a golpe de zapatilla y de historias increíbles.