Libros infantiles de hoy y de mañana 14
¿Sabéis lo que me gusta de los libros infantiles? Que no hay fronteras, que más allá de las letras existe un mundo de formas, de imágenes, que sin un solo carácter ellos solos pueden darnos una idea de lo que guardan en su interior sus pastas duras o blandas. ¡Son, lo que siempre quisimos los adultos, unos libros que no tienen ningún límite! Y quizá por eso yo sigo aquí, abriendo mis ojos y todos y cada uno de mis sentidos, para hacer a nuestros lectores, a vosotros, sí, sí, partícipes de lo que podéis encontrar cuando visitéis una librería, nuestra librería online por ejemplo, para que busquéis aquellos que os hagan sentir, con mis palabras, algo en vuestro interior. Y después, como siempre os animo, acompañar a los más pequeños en el viaje de descubrir la lectura, de descubrir lo que guardan en su interior, y la capacidad que tienen de abrir las compuertas de las emociones y crear a los lectores que, en un futuro, nos seguirán los pasos. Hoy nos toca hablar de algunos de los libros más apasionantes que me he encontrado esta semana. El resto, corre de vuestra parte.
Todo ogro, más allá de Shrek, requiere de un cuento para ellos solitos. Hambre de ogro es un libro perfecto para todos aquellos niños valientes que no temen a los malos del cuento, que no miran en su armario para ver si hay algún monstruo esperando a que se duerman, que no piensan en brujas ni en lobos feroces como una pesadilla. Porque los ogros también tienen hambre, y lo buscan, y lo consiguen, o a lo mejor no, pero lo intentan. Así que esta es una aventura en la que acompañaremos a un ogro, un malo de cuento clásico, pero que busca algo que todos queremos. Comida. Quiere alimentarse. Y lo busca en todas las casas de los malvados de cuentos que no lo son tantos cuando alguien más grande que lo quiere. Es una suerte que cayera en mis manos, gracias a Océano, este libro que me ha divertido, que me ha sorprendido y que me ha hecho darme cuenta que mi niño interior, ese que todos llevamos más o menos escondido, en realidad no ha tenido tanto miedo nunca. Sólo se trataba de leer y ver que nada peligroso sucedía realmente.
Pero, ¿y si no se tratara de ver personajes? ¿Si se tratara, únicamente, de abrir un libro y quedarte absorto en las imágenes, buscando, intentando encontrar un elemento en concreto? 600 puntos negros es una maravilla. No lo puedo describir de otra manera. Es uno de esos libros que abres y ante el que tus ojos se abren de par en par y lo único que quieres es pasarte en su compañía minutos y minutos y, si se pudiera, abrazarlo como el mejor de los amigos. Un libro que homenajea al arte, que lo homenajea de una forma soberbia, que te descubre, a cada página que abres, te sorprende todavía más, te anima a buscar, a convertirte en un investigador de unos puntos negros que se convierten en un cuadro, en una obra abstracta, que te abre los sentidos y te dejan boquiabierto. Pero me repito, aunque la genialidad es lo que tiene, las únicas palabras que salen, como con cada libro que Combel me hace descubrir, son cosas tan positivas que sería absurdo negar la evidencia. Un libro único, un libro diferente, un libro que abre las fronteras que, hacía unos minutos, creíamos cerradas para siempre.
Pero si uno de esos libros tuviera como editor a Kalandraka, ¿qué debería decir entonces? Esta es una apuesta de éxito, de satisfacción. La guía necsia es una guía sobre aspectos sorprendentes de nuestra naturaleza, sobre misterios que se pueden encontrar buceando un poco, sobre maravillas de la naturaleza. ¿Sabéis cuál ha sido el ladrido más extraño escuchado jamás? O quizá habéis pensado alguna vez, preguntándoos con esa avidez con la que lo hacéis habitualmente cuál es el árbol más exótico del mundo. Todo está aquí, con tan solo abrir la primera página y meter las narices en todos aquellos aspectos extraordinarios que jamás habíais pensado encontrar en un libro. Estamos ante una rareza, ante una obra maestra, ante un divertimento puro que nos hace querer mirar, querer saber, y sorprendernos por aquello que no creíamos que era capaz de existir en nuestro mundo. Seamos investigadores, seamos seres que se sorprenden, y podréis descubrir, por ejemplo, a un perro que tenía dos colas y que gracias a ellas su depresión mejoró instantáneamente. Un joya, compañeros, esto es una verdadera joya.
Pero a pesar de que la sorpresa forma parte de nuestra vida, también es verdad es que los sentimientos que nos hace transpirar la familia es algo importante a tener en cuenta. Cuando el abuelo fue niño es un canto de amor, de alegría, de cariño, hacia uno de los personajes que han estado ahí siempre, que han vivido cosas que a nosotros ya nos han sido dadas desde el principio, y que, en ocasiones, han permanecido invisibles por los pasillos de su casa. Porque la historia, la que creamos nosotros, es parte de la que creamos junto a los que nos rodean, y sin este libro de Valnera no sería posible considerar que la figura de los abuelos ya están debidamente descritas. Es uno de esos libros que llegan adentro, que se cuelan por las venas, que llegan al corazón y se posan tranquilamente en nuestro cuerpo para, irremediablemente, no irse jamás.