Libros infantiles de hoy y de mañana 18
Todo empieza y puede que nunca acabe. Esa es la premisa con la que comienzo cada una de estas recomendaciones de libros infantiles. Deseo que nunca se termine la visita de cada domingo para poder compartir con todos vosotros algunos de los libros más interesantes que se han editado últimamente para los más pequeños. Y quizá por esa premisa con la que empiezo cada una de estas actualizaciones es por lo que las fuerzas no me abandonan, a pesar de que una gripe intente llevarme a la cama y a dormir hasta el infinito. Será ahora, y no después, cuando podáis ver aquellos libros que me han hecho divertirme, que me han hecho emocionarme o que me han hecho caer en el amor más absoluto por la literatura y por todos aquellos cuentos que una vez tuvimos en nuestras manos y que nunca más se irán. Porque siempre digo lo mismo, pero no por ello deja de ser verdad: la literatura es esa amiga que nunca te deja porque se queda en tu interior para siempre.
Me gustan los animales. Siempre lo han hecho. Y a mi sobrino todavía más. Por eso, investigando por aquellos mundos que son las editoriales infantiles, me encontré con este sencillo libro que hace las delicias de todos aquellos que quieren conocer a los animales y que quiere tenerlos consigo siempre que quieran verlos. Zoo es, con toda seguridad, ese pasatiempo agradable, sincero, que una vez abierto y observados los animales que saltan de las páginas hacia nosotros, no podremos dejar olvidado en ningún sitio porque querremos llevárnoslo a cualquier parte. Eso ha sucedido con el pequeño que crea ruido cuando el silencio lo bañaba todo. En cada una de sus visitas, en cada uno de esos espacios de recreo cada vez que cruza el umbral de mi casa, es ese libro el que quiere y no otro. Porque estos animales le saludan y él, con esa vocecilla de grillo que tiene, les saluda y juega con ellos a todos los juegos imaginables. (Para lectores de 2 a 3 años)
¿Habéis pensado alguna vez en hacer algo pero os han dicho que no sois lo
suficientemente mayores para poder hacerlo? ¡Qué rabia dada! Esa sensación es la que he sentido leyendo esta maravilla que es Mi perrito quiere bailar ballet. Porque aunque vestido de una historia para niños, que disfrutarán con las andanzas de este perro que no quiere ser un simple perro, sino un perro bailarín, se encuentra en su interior una historia sobre las cosas que deseamos hacer y ante las que tenemos que echar valor, que coger fuerzas, y aunque todo el mundo nos diga que no podemos, nosotros tenemos que intentarlo, que probarlo, que ver si nos equivocamos o si, por el contrario, nos convertimos en profesionales de ello. Hay que pelear por nuestros sueños, imaginarlos, crearlos incluso, y es con lecturas como ésta con lo que uno aprende que aquello que queremos puede no estar tan lejos como pensamos. Porque nuestros sueños tienen un solo dueño: nosotros mismos. (Para lectores de 4 a 6 años)
Y precisamente porque la imaginación no se agota nunca, tenemos aquí Hilo sin fin para tejer a nuestro alrededor sueños de todos los colores. Que un año comience y que uno se encuentre una historia tan bella, tan colorista, tan llena de esperanza y magia no puede significar otra cosa que todo lo que vendrá ser impresionante. Una historia que nos lleva a un pueblo donde sus habitantes no llevan colores, pero en el que una niña empieza a tejer para todos ropa con la que abrigarse y así crear un mundo diferente lleno de color y, por qué no decirlo, calor. Una historia sobre lo juguetón que es el destino y cómo, con un simple encuentro entre dos elementos, se puede construir una nueva realidad que nos hará crecer como personas. Uno de esos relatos en los que los sueños, al igual que el frío, pueden meterse dentro de los huesos y no abandonarte nunca, nunca, nunca, jamás. (Para lectores de 4 a 6 años)
Para mí, y por extensión para ese sobrino del que os hablaba al principio, este está
siendo el año de descubrir la cultura japonesa. Por eso me hice con Urashima el pescador por ser una de las historias de toda generación en aquellas tierras lejanas y tiene los ingredientes necesarios para que todos aquellos que no conocen estas historias puedan hacerse con ella y disfrutarla como lo hemos hecho nosotros. La historia de un joven pescador que viaja a un mundo mágico, una fábula llena de aventuras que todos los niños que se acerquen a ella disfrutarán por su increíbles ilustraciones, por su historia absorbente y porque, además, nos permitirá conocer a la fauna marina y cómo se escribe en esa lengua tan desconocida pero que tanto nos llama la atención a todos los que leemos sobre ella. No es una historia más, es uno de esos viajes inesperados pero increíbles que nos acerca la lectura una vez más. (Para lectores de 4 a 6 años)