Si habéis crecido en los años 80 y 90 seguro que recordáis a Wally. Sí, el de Dónde está Wally. Lo emocionante que era buscarlo entre cientos de personas y ser el primero en decir, «¡Aquí, aquí! Yo, yo. ¡Ya lo he visto!». Y seguro que también os acordáis de aquellos libros del sello Timun Mas que proclamaban en su portada «Elige tu propia aventura». Porque lo que nos llamaba la atención era eso precisamente: ser dueños y señores de la aventura que nos iba a ofrecer el libro y que se nos concediera la oportunidad de participar en la historia, de cambiar los hechos, de ayudar a los personajes. Y, por supuesto, seguro segurísimo que todos conocéis a un arqueólogo muy famoso llamado Indiana Jones.
Bueno, pues si habéis contestado a todo que sí, o si sois demasiado jóvenes como para haber vivido todo eso pero se os ha hecho la boca agua y os hubiera encantado ser un poco como Indi, encontrar a Wally perdido en una gran ciudad y vivir vuestra propia aventura, el libro que hoy os traigo es el indicado para vosotros, sin duda.
¿Por qué? Muy sencillo. Los diarios de Tony Lynx: El libro del poder, de Miguel Griot, combina todo lo que os he comentado para que los adultos recordemos nuestra infancia y disfrutemos como niños con esta historia; y para que los niños puedan vivir la magia que tienen las historias de detectives con enigmas y misterios donde el lector es un claro protagonista y participa como un personaje más.
Pero, ¿de qué va este libro exactamente? ¿Quién es Tony Lynx? Pues este libro no es un libro cualquiera. Es nada más y nada menos que el diario de investigación de un gran buscador de tesoros, que encima también es detective y responde al nombre de Tony Lynx.
Este aventurero es uno de nuestros protagonistas, y él mismo se nos presenta al comienzo de la historia dirigiéndose directamente al lector. Esto es justamente lo interesante, lo que llama la atención. El propio Tony es el narrador en primera persona y nos hace partícipes para que le ayudemos a localizar el paradero del arqueólogo Leopold Abbey —el padre de Rose, la chica que contrata a Tony para que le acompañe en su búsqueda—, que desapareció después de partir en una expedición secreta.
Así, en cada página encontraremos un enigma que debemos descifrar prestando muchísima atención a la ilustración para poder seguir adelante, superando pruebas y obstáculos, si queremos conseguir nuestro objetivo: encontrar a Leopold Abbey y… un objeto de incalculable valor.
¿No os parece tremendamente divertido y original? Yo creo que el planteamiento es muy creativo y hace que devoremos este libro en un rato, casi sin darnos cuenta, mientras volcamos todos nuestros sentidos en descifrar las incógnitas y recorrer con nuestros ojos cada página al detalle para que no se nos escape nada.
Aunque también es cierto que algunos enigmas me han hecho sudar la gota gorda intentando averiguar lo que nos pide cada pregunta. El autor nos demuestra con esto que se lo ha currado mucho, vaya. No nos lo pone nada fácil y eso es lo que nos motiva a continuar.
Asimismo, las ilustraciones de Álvaro Ortiz encajan exactamente con este tipo de trama, ya que están trazadas de tal forma que hacen que sea más difícil hallar lo que se nos propone. Al mismo tiempo son unas ilustraciones muy peculiares y graciosas, perfectas para dar vida a esta historia y a sus personajes. De hecho, a mí me han recordado a los dibujos de los tebeos de Tintín, cosa que me agrada porque yo he sido y soy una gran aficionada del reportero belga.
Para concluir diré que Los diarios de Tony Lynx: El libro del poder, de Miguel Griot, es un libro ideal para cualquier momento de la vida. Perfecto para entretenernos a nosotros y a nuestros pequeños y así hacer algo diferente, sin televisión ni móviles. Solo nosotros, los niños y este maravilloso rompecabezas en forma de libro que nos empuja a todos a agudizar nuestro ingenio, a seguir las pistas y a estrujar nuestra mente para llegar al final y resolver los misterios ocultos.
Y, justamente ahora, en estos tiempos tan complicados que estamos viviendo, tiempos en los que debemos permanecer en casa y los renacuajos ya no saben qué hacer porque han hecho de todo y se aburren, descubrir este diario y los secretos que esconde les abrirá los ojos y les mantendrá pegados a sus páginas.
Definitivamente, si os gustó Tadeo Jones, os va a encantar Tony Lynx. Os aseguro que esta historia es idónea para disfrutarla en familia, porque os lo pasaréis en grande viendo cómo vuestros hijos aprenden y, por supuesto, aprendiendo con ellos.