Mujeres tenían que ser

Mujeres tenían que ser, de Felipe Pigna

La historia no es, solamente, la conjunción de relatos personales  y destacados  sino el recorrido que todos hicieron  a través de los años. Pocas veces es posible encontrarse con un libro que plantee una investigación tan exacta y que abarque las costumbres y problemas de un gran grupo de personas.

En este caso que presentamos hoy, la historia se focaliza en ellas, las mujeres. Género subestimado durante siglos, parece haber contado con tantos obstáculos como capacidades. En este libro extenso, pero para nada aburrido, se repasa las condiciones que vivieron (y sufrieron, en algunos casos) las mujeres desde la época de la conquista española en Argentina y hasta 1930.

Argentina es sólo un lugar de los miles que posee este mundo en donde se desarrollaron las mujeres. En otras naciones más o menos avanzadas, este género  ha sabido defenderse y luchar por sus derechos a la vez de aprovechar las prerrogativas de su condición. Sin embargo, abarcar una investigación mundial sería casi una falta de respeto a los detalles que hacen de cada comunidad única.

Felipe Pigna, entonces, prefirió enfocarse a la Argentina, que además conoce y maneja desde hace años con otros libros  de la historia nacional. El ejemplar comienza con una radiografía de las mujeres durante la conquista de América, donde  la llegada de los europeos significó la disgregación de pueblos originarios y un gran cambio socio cultural para aquellas mujeres que ya contaban con su estilo de vida.

Tal vez lo más interesante del libro viene después, con las épocas contemporáneas, donde podemos establecer una mejor comparación con la vida actual que llevamos las mujeres. Muchos personajes femeninos fueron claves en la época de la independencia y tantas otras desplegaron su astucia y estrategia en épocas coloniales donde la mujer no tenía una voz formal. Lo más duro de la historia es lo que no se cuenta casi nunca: el calvario de las mujeres más humildes que vivían subyugadas no sólo a los hombres en general sino también a sus patrones.

La investigación de Felipe Pigna es exhaustiva y muy valorable. Recoge testimonios históricos, cifras y opiniones muy valiosas para armar un rompecabezas inagotable que recopila los sentimientos y las vicisitudes que pasaron las mujeres en Argentina en los últimos siglos. La sencilla redacción y la precisión en el uso del lenguaje lo convierten en un ejemplar de acceso universal, para no quedarse afuera.

Leer este libro fue conocer un poco más de los orígenes y de lo que no existía hace algunos años atrás. La actitud de las mujeres fue siempre la misma, solo que sus palabras fueron menos oídas antes y consideradas luego.  Es interesante siempre recorrer la historia y destacar a aquellos personajes precisos que hicieron la diferencia. Lee historia siempre es viajar.