El escritor Michael Ende, en su mágica novela La historia interminable, trató un peliagudo tema que bien podría haber servido de base para la historia que voy a reseñar. Se trata del denominado Eterno Retorno, un concepto filosófico que plantea el resurgimiento de la vida tras su consagración a modo de bucle; la vida da paso a la muerte del mismo modo que esta crea de nuevo vida. Una definición muy laxa, pero comprensible a la vez. Ya verás. En el Capítulo XII de dicha novela, la Emperatriz Infantil le pide al Viejo de la Montaña Errante que le cuente la Historia Interminable. La respuesta del Viejo es: «Si hago eso, tendré que escribirlo todo otra vez. Y lo que escribo sucederá de nuevo. […] eso significa el final sin final. Entraremos en el círculo del Eterno Retorno. Y de él no se puede escapar».
Bien, bajo esta idea, todo aquello que ya se ha escrito volverá a suceder. Como el Fénix (esto ya viene de antiguo, como veis) resurge de sus cenizas, la historia de un personaje, pese a su final, vuelve a dar un nuevo comienzo. Y ahí Neil Gaiman se inspiró para crear esta fabulosa historia sobre Batman: ¿Qué le sucedió al Cruzado de la capa?
De Batman ya se han contado centenares de historias. Se le ha intentado matar en muchas de ellas y casi siempre sale indemne por mil y un motivos diferentes. Este cómic, escrito de forma magistral y con un planteamiento más filosófico, da una vía de escape y solución alternativa a la muerte de tan legendario personaje. Y sí, no creáis que adelanto nada del final. Hay un funeral. En las primeras páginas yace sobre un ataúd con su icónico traje gris y azul. A su alrededor, le observan todos sus aliados y sus rivales. Pero la voz de Batman se sigue preguntando durante toda la historia qué ha sucedido. «¿Estoy muerto?»
Uno a uno, cada personaje relata los posibles finales de Batman: Catwoman, El Acertijo, Dos Caras, Joker y el que para mí ha sido el mejor relato de todos, el que narra Alfred Pennyworth. En serio, ahora que el cine ha degradado tanto el nivel de DC, que un director con narices dirija una peli basada en ese relato.
Pero, ¿Batman está muerto? Aquí es donde he encontrado los paralelismos que resaltaba al principio de la reseña sobre el final sin final. La interminable historia del hombre murciélago al que Neil Gaiman ha dedicado uno de los mejores cómics escritos sobre él. Para Gaiman, Batman es Gotham y todos sus personajes. Y Gotham necesita a Batman del mismo modo que él se alimenta de la degradación y corrupción de sus calles y villanos. El día necesita a la noche tal y como la noche vuelve a crear el día. Una historia que se escribe para dar un final y que a su vez crea un nuevo comienzo.
El cómic es toda una compilación de homenajes a los grandes escritores y dibujantes que durante tantos años han dado vida al personaje. Diversidad que se puede apreciar en los dibujos de Andy Kubert en los que ha rescatado las diferentes etapas de cada uno de los miembros de esta historieta. No me había percatado de un detalle hasta que mi hermano, que leía el cómic conmigo, me lo indicó: en una de las viñetas hay hasta dos Joker de etapas diferentes. A ver si das con ellos. El propio Gaiman deja claro en sus anotaciones que para la creación de este cómic se basó en la historia que Alan Moore escribió sobre Superman, ¿Qué fue del Hombre del Mañana?. La idea de crear un argumento basado en relatos sobre las posibles muertes de Batman le sedujo de tal forma, que consideró óptimo dedicar la historia a todos sus ídolos del mundo del cómic.
El tomo que edita ECC recoge también bocetos y arte conceptual de algunas viñetas por parte del dibujante además de otras historias alternativas que escribió Gaiman sobre el Caballero Oscuro. Dos de ellas pertenecientes a la serie Orígenes secretos, donde el protagonismo recae en El Acertijo o Poison Ivy, y la otra maravilla de historieta corta, Batman. Black and White n. 2, donde Batman y Joker no son más que actores cuyo trabajo consiste en escenificar las viñetas que otros escriben sobre ellos.
Para aquellos que quieren adentrarse en el universo de Batman y decidan pasearse por esos templos que son las tiendas de cómics buscando historias del hombre murciélago, muy seguramente se dejen aconsejar por el tendero. Este les recomendará, de esto también estoy seguro, las consideradas joyas de la corona: El regreso del Caballero Oscuro y Año Uno, ambos de Frank Miller y La broma asesina, de Alan Moore. No discutiré sobre la calidad de estas tres obras que son excelentes, pero sí considero que la recomendación queda muy empobrecida dada la cantidad de historias que existen sobre Batman muy al nivel de estas tres. ¿Qué le sucedió al Cruzado de la Capa? bien podría ser una joya más digna de incluir en esa corona. Aunque me gusta más pensar que cada lector, en la intimidad que le ofrece su habitación donde lee sus cómics, puede encontrar su gran historia.