Sgto. Rock: Entre el infierno y algo peor, de Azzarello y Kubert
No soy muy amigo de los cómics bélicos, y creo que éste es el primero que leo. Lo que me hizo reparar la atención en él fue el hecho de tratarse de un tebeo con un nombre que no me era del todo desconocido ya que en algún remoto lugar de mi memoria recordaba haber leído bien sobre él o, más concretamente, sobre el personaje, un tal Rock, quien por lo visto era mítico, un clásico. Además, y esto otro también es importante, estaba tan de oferta que me pareció una ganga.
¿Y de qué va éste “Entre el infierno y algo peor? Pues del intento que el Sargento Rock al frente de su pelotón de la Compañía Easy harán por avanzar hacia Berlín por el bosque de Hürtgen, al cual no llega la luz del sol, haciendo frente a los alemanes que les salen al paso. En una refriega, logran hacer prisioneros a cuatro oficiales y cuando los trasladan son atacados. En el ajetreo de la batalla tres de los cuatro prisioneros han sido abatidos, pero poco tardará Rock en darse cuenta de que no han caído por balas propias del lance, sino que han sido ejecutados a quemarropa.
Con ésta premisa, se nos intenta vender un whodunit bélico. Rock sospecha de sus hombres y eso le duele, porque conoce, o cree conocer a sus hombres, y no los creía capaces de hacer algo semejante. Varias veces le veremos decir que no es lo mismo matar en el transcurso de una batalla que asesinar, por muy enemigos que sean los caídos.
Sin embargo, la promesa de una trama de novela negra que parecía guiar el espíritu de ésta historia se queda en eso, en una promesa. El cómic avanza pero la intriga no. Seguimos asistiendo al avance del pelotón en su internada en el bosque con algunos sobresaltos por aquí, alguna pelea intestina por allá y algún que otro muerto. No hay investigación ni nada parecido. Sí, ya sé que están en medio de una guerra y que tienen que intentar salvar el culo, -de hecho hay personajes que aparecen en una viñeta para morir dos páginas después-,pero que no nos vendan en la contraportada una trama detectivesca ambientada en la II Guerra Mundial cuando no la hay. Para nada.
El guión consigue transmitir algo parecido a la camaradería entre los miembros de la Compañía, nos da a entender que llevan tiempo “viviendo” juntos y que se conocen bien unos a otros, pero tampoco profundiza más en los personajes.
La conclusión del cómic es poco satisfactoria e incluso diría que, sin ser compleja y siendo esperada, es algo rebuscada.
Por otra parte, en el aspecto gráfico nada que objetar. Al contrario. Viñetas grandes, dibujo limpio, claro y clásico y un entintado que se adapta a la perfección al dibujo y al entorno. Lo mejor del cómic.
Hola Diego!
Un palcer conocerte. Y por cierto, me alegra que las ilustraciones sean buenas, que yo siempre digo eso de que algo bueno hay siempre en los libros jajjaja.
Espero que tengas má suerte en otra ocasión.
Un abrazo!
Gracias, Susana. Un placer para mi también.
La verdad es que leo bastante cómic y la mayoría de las veces acierto con ellos. Creo (y espero) que el próximo que tengo entre manos (Calígula)me va a gustar mucho…
Saludos.