Sé lo que estás pensando, de John Verdon
La novela policiaca está de moda, es algo que no podemos negar, desde hace unos años hasta ahora, los libros de Kurt Wallander, la famosa saga Millenium y todos los autores nórdicos que han venido detrás inundan los primeros puestos de las listas de ventas. Es por ello que cuando decido leer algo de este género intento elegirlo bien, porque la reiteración en los mismos temas puede llevar al hartazgo. Y he aquí que un día ojeando libros me encuentro con una portada y una sinopsis muy interesantes (si, se que quizás no es la mejor manera de elegir libros, pero me sigo dejando llevar de vez en cuando) y que cuenta con un boca a boca muy favorable que lo ha colocado en los primeros puestos de las listas de ventas sin una gran campaña de promoción.
Estoy hablando de Sé lo que estás pensando primera novela de John Verdon. En ella nos encontramos con el ex detective David Gurney, que después de 25 años en el cuerpo de policía decide retirarse y alejarse de la ciudad para intentar resolver sus problemas de pareja. Todo esto cambia con la llamada de un viejo amigo que le pide ayuda en un caso muy peculiar, ha recibido una carta que le invita a pensar un número del uno al mil, junto al texto se incluye un pequeño sobre en el que para su sorpresa se encuentra un papel con el número exacto en el que había pensado.
Con este comienzo tan vibrante empieza un libro, en el que seguimos la investigación en busca de un asesino que parece ser capaz de leer mentes y de realizar actos sobrenaturales. Pero no se queda solo en eso la novela, también iremos descubriendo la historia personal de Gurney, sus motivos para retirarse y la causa de los problemas en su matrimonio, creando dos líneas de narración que se van mezclando.
El libro se lee prácticamente solo, es de aquellos que empiezas y lo devoras en pocos días, eso no quiere decir que no tenga sus cosas buenas y sus cosas malas.
Personalmente he de decir que el personaje de Gurney me ha parecido muy interesante, el autor va dejando caer pequeñas referencias a antiguos casos que bien podrían dar lugar a precuelas sobre este detective en el que se adivinan bastantes claroscuros.
El principal defecto que le podría poner al libro es el desenlace del caso, un poco precipitado y quizás algo simplón en comparación a la historia que estábamos leyendo hasta el momento, por fortuna ese pequeño mal sabor de boca queda oculto con un epilogo final maravilloso del que prefiero no contar nada para que cada uno lo disfrutéis a vuestra manera.
El libro se divide claramente en tres partes ya marcadas por el autor que siguen el canon clásico de presentación, nudo y desenlace, pero al margen de eso se podría establecer otra diferenciación en su género, como thriller policiaco es muy entretenido y más que correcto, te mantiene enganchado a una investigación que avanza sin prisa pero sin pausa, con una narración muy fluida y que nos deja intuir como los intereses políticos y personales a veces priman sobre la propia justicia, pero su punto fuerte está en la parte quizás más intimista, la del desarrollo del protagonista, donde observamos su relación con su mujer y sus miserias personales y en el esbozo de algunos personajes secundarios sobre los que me da la impresión de que se incidirá más en algunos futuras entregas del autor.
La historia de John Verdon guarda ciertos paralelismos con la del protagonista de su novela, procedentes del mundo publicitario, donde llego a ejercer como director creativo en varias agencias de publicidad de Manhattan, decidió dejar la gran ciudad y trasladarse a un entorno rural en el norte del estado de Nueva York.
Con estos precedentes podemos preguntarnos si el éxito de este libro será fruto de una ingeniosa campaña de marketing más que de su propia calidad literaria, pero no, en mi opinión Verdon apunta maneras de gran escritor de novela policiaca y esperemos que en las próximas entregas de las aventuras del detective Gurney potencie sus virtudes y pula esos pequeños defectos que no hacen que su obra sea totalmente disfrutable.
Sobre este respecto ya está disponible la segunda entrega de esta saga No abras los ojos a la que yo particularmente le tengo bastantes ganas y que esperamos poder reseñaros lo antes posible.
Lo leí i posteé hace un tiempo y recuerdo que, como a ti, tampoco me acabó de parecer redondo sinó con muchas aristas por pulir, demasiados acertijos, una mente excesivamente brillante y un final previsible, evidencian lo que ya dijiste y es que es una primera novela donde se suele volcar en exceso para conseguir ser diferente y sorprendente a la vez. Estoy esperando a que la segunda salga en bolsillo para comprobar si ha mejorado o se ha estancado.
Slds.
Gracias por el comentario Interrobang, veo que en eso estamos de acuerdo, el autor se arriesga demasiado intentando crear un asesino tan brillante, porque la resolución también debería serlo y sin embargo se queda algo coja, aún así, creo que tiene bastante potencial en el género del thriller policíaco, a ver si me hago con la segunda parte para ver como ha evolucionado. ¿A tí que te parece la historia personal del policía? A mí es lo que más me gustó, aunque deja cosas un poco en el aire, como el personaje de la marchante de arte, que parece que va a ser más importante y al final se queda en nada. El fiscal y algunos policías que le acompañan en la investigación creo que también podrían dar más de sí en futuras entregas de la saga.
Lo tengo en la estantería esperando. Después de leerte, baja mucho mis expectativas sobre este libro, sobre todo con respecto al final. Muy buena reseña.
Besotes!!!
Bueno Margarita, te diría que le dieras una oportunidad, tanto el proceso de la investigación, como la vida personal del detective Gurney me parecen muy interesantes, respecto al final, bueno, es cuestión de opiniones, en la mía es un tanto flojo, pero eso no estropea el conjunto de la novela.
Gracias por leernos.
Un saludo