Silencio en Milán

Silencio en Milán, de Anna Maria Ortese

Silencio en Milán

Toda ciudad tiene su característica principal: París, es la capital del romanticismo; Roma, es sinónimo de arte; Atenas, el lugar de la cultura clásica. Y así un sin fin de lugares que nos hacen movernos para poder asombrarnos a cada paso que damos. Pero, ¿y Milán? ¿Qué se puede decir de Milán? ¿Qué esconde entre sus calles esta pequeña ciudad? ¿Cuáles son los rincones que nos depara esta localidad italiana? Consciente de la dificultad de encontrar una respuesta adecuada para ello, me sumergí de lleno en este pequeño grupo de relatos que nos devuelve una imagen de Milán oscuro, lleno de vida, donde la gente que pasa por sus callejuelas, su estación de trenes, y que amanece y anochece todos los días, es capaz de hacernos vivir una experiencia inolvidable.

“Silencio en Milán” no es una guía turística. De hecho, si alguien pretende tomar referencias para poder visitar la ciudad, se llevará un pequeño desengaño. Entonces, ¿qué es “Silencio en Milán” si está incluido en el género de literatura de viajes? Lo que nos ofrece Anna Maria Ortese es un paseo por los sentimientos de su gente, desde la estación de trenes hasta los aparthoteles que la pueblan. Un viaje al interior de personas envueltas en una pequeña locura, en los desengaños que crea una ciudad caminando por sus calles, y en cómo la historia teje numerosas trampas para volver a repetir situaciones, ideas y momentos que nos han llegado muy dentro.

Siempre he pensado que las recopilaciones de relatos tienen ventajas y desventajas para el lector. Sobre las primeras, al tratarse de una extensión corta, proporciona al lector una oportunidad única para meterse de lleno en la historia. Y sobre las segundas, hay veces que los relatos no tienen un nexo, algo que los una y puede dar lugar a ciertos equívocos, a malentendidos que al lector, por no estar en la misma época en la que se escribieron, pueden hacerle perderse. Por ello, dentro de “Silencio en Milán” destaco tres de los relatos, porque cuando los acabé me hicieron asombrarme de cómo es posible que, en tan pocas palabras, se encierren tantas verdades. Ahí voy:

1. Las pirámides de Milán: Increíble. No puedo decir más. Un viaje al centro de lo que debió ser Milán y su gente en la época en la que Anna Maria Ortese lo escribió. La soledad, el ser humano radiografiado con tanta ternura, tanta pasión y tanto horror al mismo tiempo, es de merecer un diez como pocas veces puedo decirlo.

2 .La mudanza: Relato que cierra este pequeño volumen. Sobresaliente la capacidad de explicar al lector una cosa tan cotidiana, como lo son las mudanzas, y comprobar que dentro de las despedidas y los nuevos inicios, se encierran tal torrente de sentimientos que uno no es capaz de imaginar.

3.Una noche en la estación: Lo aclaro antes: no soy objetivo con este tema. Las estaciones de tren siempre ha sido uno de mis lugares favoritos sobre los que contar historias. Me producen un magnetismo único. Y comprobar cómo es posible embarcarse por su fachada, por su interior, por la gente que espera a trenes que ya se fueron y que no volverán nunca, me ha parecido tan mágico, tan profundo, tan conmovedor, que cuando acabé de leerlo sentía la necesidad de saber más sobre aquellos que esperan que vuelva el sonido de los sueños que ya se fueron.

Anna Maria Ortese, nos regala historias del Milán desconocido, de una ciudad en la que perdernos y encontrarnos muchas veces, porque ninguna será parecida a la anterior. Nos presenta un pequeño rincón donde darnos cuenta de que nos rodea tanto silencio que, precisamente por ello, y como escuché hace mucho tiempo, buscamos en nuestra vida infinidad de ruidos con los que llenarlo.

3 comentarios en «Silencio en Milán»

  1. Me gusta el relato. Y este año estoy teniendo muy buena experiencia en este género. Y por lo que cuentas, creo que con este libro también voy a disfrutar mucho con sus historias y conociendo un poquito de Milán, aunque sea sólo a través de sus páginas. Pero también es una forma bonita de viajar.
    Besotes!!!

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  2. Gracias por la reseña Sergio.
    El libro parece muy interesante y tengo ganas de leerlo.
    Es muy agradable leer buenas recomendaciones de libros de relatos porque es difícil encontrar recopilaciones que no sean irregulares debido a la dispar calidad de los textos o a una temática demasiado errática.

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  3. Margarita: Yo siempre he pensado que, mucho mejor que visitas guiadas por los lugares, es conocer cómo son las personas de los lugares y los que nos puedan enseñar. Si te gustan esos relatos, este es uno de tus libros sin duda.

    Sonia: La verdad es que el conjunto de los relatos mantienen una misma sincronía y eso se agradece. Ya he puesto en la reseña los que más me gustaron a mí, pero sin desmerecer a los otros. Así que me alegra que te haya gustado la reseña! 😀 Todo se hace por vosotros, sin duda alguna.

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