Tiempo de espera, de Elizabeth Jane Howard

De entre todos los libros que leí el verano de 2017, hubo uno que me enganchó y me encantó de una manera especial. Su título es Los años ligeros, Crónica de los Cazalet, de la escritora inglesa Elizabeth Jane Howard y cuya reseña podéis volver a leer aquí. ¿Qué tenía este libro que me fascinó tanto? Pues, queridos, lo tenía todo. Este libro era el primero de una saga familiar, la saga de los Cazalet. Ya comentaba yo en la anterior reseña que tengo una cierta predilección por este tipo de novelas tan british ambientadas a comienzos del siglo XX. Me gusta todo: el ambiente, los paisajes, la elegancia, el humor británico, ese savoir-faire, esa ironía, esas rencillas familiares.

Si Los años ligeros era un reflejo maravilloso de las costumbres de la alta sociedad británica de aquella época centradas en la familia Cazalet, Tiempo de espera es la esperada continuación de esta estupenda saga familiar. El primer libro de la saga se ambientaba en los veranos de 1937 y 1938 en Home Place, una casa señorial propiedad de la familia que se encuentra en la campiña de Sussex, donde la vida de esta familia transcurre plácidamente, o al menos, en apariencia.

Esta vez, en Tiempo de espera, estamos en el año 1939. Un año decisivo en el que Hitler acaba de invadir Polonia y los primeros presagios de la guerra comienzan a azotar la vida de los Cazalet. Ya empiezan a notarse los primeros indicios de la inminente guerra: la escasez de alimentos, los recatos y, sobre todo, ese malestar que se instala en la familia como una sombra que empieza a cubrir una vida demasiado contemplativa y dedicada al lujo que comienza a dar sus últimos alientos. Los hombres son llamados al frente a luchar mientras otros han de resignarse a ver cómo los demás luchan por su país. Los más jóvenes, inocentes aún, no se dan cuenta de que están asistiendo a los últimos años de tranquilidad. Y las mujeres, ellas siempre, serán las que, estoicamente, ocupen el lugar entre ambos bandos, conscientes de la realidad y de que han de mediar entre ambos mundos. Haciéndolo como sólo ellas lo saben hacer.

Tiempo de espera es una maravillosa crónica de aquellos años convulsos a través de la sofisticada familia Cazalet. Había echado tanto de menos volver a esta familia que se me ha hecho eterno el tiempo entre entrega y entrega. Siruela, por favor, no tardéis tanto en ofrecernos la tercera entrega de los Cazalet: crean adicción.

Y es que la magnífica Elizabeth Jane Howard es una escritora brillante que retrata a los personajes de una forma tan verosímil y delicada que es inevitable no sentir atracción por esta familia y esta crónica de principios del siglo XX. He vuelto a enamorarme de la familia, a reír, a sufrir y sorprenderme con ellos. Al tiempo que termino esta reseña me doy cuenta de que Siruela ya ha publicado la tercera entrega: Confusión, crónicas de los Cazalet y mi sonrisa me llega de oreja a oreja. Lectores, volveré muy pronto con los Cazalet. Qué alegría más grande.