Ventajas de viajar en tren, de Antonio Orejudo
Los medios de transporte son un mundo. La gente se encuentra por breves momentos o extensas horas. El viajero comparte con un extraño el asiento, el aire y el contexto mientas se sumerge en sus propios pensamientos. Algunas veces, hablan. Otras, eligen ignorarse con la excusa de un libro, la música y más recientemente la alienación que genera el celular. Y de vez en cuanto, al lado de ese pasajero en tránsito de la vida, se encuentra con un excéntrico que comparte una historia fuera de lo normal. Ventajas de viajar en tren de Antonio Orejudo, comienza con un encuentro así.
Helga deja a su marido en un psiquiátrico y se sube al tren. Un hombre, psiquiatra de la clínica, es su compañero de viaje. Lleva un cuaderno con una historia, que comienza a relatar. Alguien que trabaja con la mente de las personas no tiene historias banales. Todo lo contrario, escuchan todo tipo de problemáticas, alucinaciones y detalles inverosímiles. Y eso es lo que comienza a contarle a Helga.
Es un relato dentro de otro relato dentro de otro relato y, obvio, dentro de otro relato. Increíblemente, el lector no se pierde. Cuando lo absurdo de aquello que nos cuenta el psiquiatra nos atrapa, no le perdemos la huella a los personajes ni a sus hipótesis, aún pareciéndonos extravagantes y disparatadas.
Hay tiempo también para conocer un poco más a Helga –su biografía colocada en la historia sutilmente y, cuando el lector se da cuenta, ya la está conociendo- e ir transformando todas las historias en una novela única, unida por todas las aristas sueltas.
Los personajes excéntricos que Orejudo coloca, la situación extraña de viajar en un tren y de repente verse involucrado en un serie de episodios ridículos parecen inverosímiles. Y sin embargo, el lector es succionado hasta alcanzar un final brillante.
La esquizofrenia es uno de los temas que más me gusta leer en la literatura. Culpo a El sobrino de Wittgenstein de Thomas Bernhard, uno de mis libros favoritos. Entonces, al leer la contraportada, no pude dejar de sentirme intrigada en conocer las historias que se me revelarían y aún con una positiva cantidad de expectativas, Orejudo logró superarlas.
No es sencillo mezclar historias que nuestro cerebro tiene que ir conectando mientras lee y meternos como en una matrioska rusa, que al abrir sale una más pequeña y otra más y otra. Trasladarlo a la literatura puede parecer sencillo pero con una trama compleja con detalles mínimos que hacen aún más creíble el relato de un psiquiatra que ha escuchado tanto a sus pacientes, es claro que no. El autor nos conduce perfectamente, sin asustarnos ante la idea de una confusión de contextos.
El mundo, con todos nosotros como protagonistas, está lleno de posibles historias para contar. Hay quienes eligen un disparador como el viaje en un tren para regalarnos una buena lectura y Ventajas de viajar en tren de Antonio Orejudo es una de ellas.
Rosario Arán (rosearan@librosyliteratura.es)
Tw: @rosearan
Lo he leído por fin Rose, y me ha parecido una genialidad auténtica!!!