Vicios del servicio, de César Blasco

vicios del servicioHace mucho tiempo, allá por el 2011, leí una novela de un autor que pocos conocían, Cesar Blasco, yo lo descubrí gracias a las redes sociales, al boca a boca como dicen unos, o boca oreja como dicen otros, aunque como estamos hablando de libros lo suyo sería decir “ojo a oreja”. “Penurias exquisitas”, fue un libro que recomendé mucho y que divirtió a casi todos los que lo leyeron. Un libro con una feroz crítica social en clave de humor.

Y hace muy poco descubrí que César Blasco regresaba con otro libro y desde ese momento ya quise saber cómo había sido la evolución de este autor.

También tengo que decir que la portada no me ha convencido nada, de hecho, de no saber que era un libro de este autor estoy absolutamente segura que jamás hubiese entrado en mis estanterías, porque no habría reparado en el, o directamente lo habría rechazado. Ahora, después de haberlo leído, sigo sin comprender el porqué de esta portada en relación con lo leído.

“Consol examinaba con gesto experto el retrete en los servicios de la celda que ocupaba junto a media docena de detenidas en las instalaciones de la comisaría de la Policía Autonómica de Les Corts. Había sido arrestada durante los disturbios que siguieron a la disolución por los Mossos d´Escuadra de una concentración no autorizada entre el Palau de la Generalitat en contra de los recortes sociales previstos en los presupuestos del Gobierno Autonómico para el 2012…”

Pues así empieza “VICIOS del servicio”, la nueva novela de César Blasco, contándonos que Consol, la mujer de Pere Gil i Puyuelo, un empresario catalán (o catalanizado) ha terminado detenida tras su participación en una manifestación. Y si bien su marido es un empresario que aprovecha todos los resquicios legales para ahorrarse todo el gasto posible en sus trabajadores, además de relacionarse “como se debe” para obtener contratos con la Administración autonómica, su curiosa esposa, una obsesiva de la higiene, se dedica a involucrarse en diversas actividades en algunas “oeneges”. La familia del empresario se completa con Paloma, la hija ultraconsentida del matrimonio, una joven acostumbrada a no hacer nada que mantiene una relación con un “perroflauta” (esto dicho desde mi más absoluto respeto) llamado Sócrates. También, y desde hace muy poco convive con ellos el padre de Pere, Miguel, un agricultor aragonés, que creará diversas situaciones interesantes en la novela.

Por otro lado, y no menos interesante, está la plantilla de la empresa, que está compuesta en su integridad por personas por las que el empresario obtiene pingües beneficios tanto fiscales como por parte de la SS.SS. Si leen los agradecimientos de la solapa del libro, verán que la corrupción es la gran protagonista, ya que nos encontramos ante un empresario que tiene, y sobre todo ha tenido en el pasado, negocios turbios con políticos corruptos.

Estamos en tiempos de crisis, la empresa tiene, como muchas pequeñas empresas familiares, multitud de problemas económicos, y todos deben arrimar el hombro; y cuando todos tienen que “poner” en lugar de “llevarse”, aparecen los problemas.

Humor negro y sátira por partes iguales; el egoísmo humano, ese que va más allá de la picaresca tan característica en nuestro país… Y en otros también, no vayamos a pensar que somos los únicos que queremos ganar mucho y pagar pocos impuestos.

Tengo que reconocer que en ocasiones no he sabido si reírme o sonrojarme, es lo que pasa cuando se está al límite del humor, esa delgada línea que separa el humor del horror.

Los personajes son todos absurdamente reconocibles, quiero decir que son, llevados al límite, representantes de nuestra sociedad, gente que se relaciona con nosotros todos los días, incluso alguno podemos ser nosotros mismos. Los capítulos en los que aparecen Remedios y Climet, dos de los trabajadores, me han recordado al teatro de lo absurdo de Eugene Ionesco aunque mucho más cercano a nosotros como el de nuestro gran Maura.

“VICIOS del servicio” es una novela que gustará a muchos de los que se acercaron a aquellas viejas pero tan actuales “Penurias exquisitas”, porque si uno de los objetivos del autor era conseguir con este libro horrorizar al lector hasta el punto de dudar entre la risotada y la vergüenza probablemente lo ha conseguido. Lo que no dudo yo y desde luego me creo, es que, como el propio autor nos dice, las editoriales convencionales hayan descartado este libro, pues su contenido, tan políticamente incorrecto, no solo no encaja con ellas, sino que podría ponerlas en apuros con muchos de sus lectores.

2 comentarios en «Vicios del servicio, de César Blasco»

  1. Ya estoy aquí, vuelvo a ponerme al día con lo que nos recomiendas. Un reseña impecable, vamos, tiene todo lo necesario para hacernos picar, me ha hecho gracia eso de que algunos de los personajes podemos identificarlos rápidamene con nosotros mismo, jajajajaja. Está bien eso. Por cierto, ¿sabes que hoy precisamente es día de pago a la SS.SS?

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    • Jajjajaja seguro que pasarias páginas y páginas asintiendo con la cabeza
      Bueno el caso es que ahora lo está leyendo mi padre y dice que le divierte al tiempo que hace mala sangre con las barbaridades e irregularidades y trapicheos entre empresarios y políticos!! 🙁
      Un abrazo muy veraniego!!

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