Vida líquida, de Zygmunt Bauman
La vida líquida. ¿Qué es? ¿Cómo nos afecta a las personas que vivimos en ella? Son preguntas que, para alguien que no esté acostumbrado le resultarán ajenas. Para explicarlo, diremos que se trata de un tipo de vida, en el que su sociedad no mantiene su forma durante mucho tiempo, no encontrando nunca ni el principio ni el final necesario. Dicho así, puede sonar a cuento de ciencia ficción, pero no lo es. Hoy en día, cada vez estamos más destinados a no ser, a que nuestras posesiones, nuestros valores, nuestras actitudes, se escapen entre los dedos como agua, de ahí que la comparación con el líquido que, paradojas de la vida, tanto llevamos en nuestro interior. Dichas sociedades persisten, pero de una forma pobre, sin ver ningún futuro certero, ya que todos los futuros que puedan darse, serán reinventados una y otra vez en un bucle que no acaba nunca. ¿Somos nosotros así? ¿Es nuestra sociedad de esta manera? Podremos encontrar argumentaciones en contra, argumentaciones a favor, pero lo que sí puedo decir es que, después de todo, esto nos crea un debate del que no estamos exentos ninguno de nosotros.
¿Cómo es la cultura en la vida líquida? ¿Y la libertad? ¿Cómo son los consumidores en una sociedad líquida como la que estamos viviendo? Toda una serie de preguntas que gracias a la lectura podremos responder, o simplemente pensar en lo que estamos construyendo.
Zygmynt Bauman acuñó su término “líquido” hace algún tiempo, cuando una sociedad como la nuestra todavía pertenecía a ese gran grupo en el que las cosas iban bien, no nos faltaba de nada, y vivíamos en un sueño de posesiones sin fin. ¿Cómo definir entonces lo que nos presenta en este libro, relacionándolo con lo que estamos viviendo ahora? Es sencillo: en la búsqueda de identidad de un sujeto, nos encontramos con que él mismo no puede forjarse una concreta, porque es la misma sociedad la que le pide flexibilidad, que se vaya organizando según los cambios, por lo que uno de los grandes problemas de este último siglo es precisamente eso: la falta de identidad fija, la falta de una identidad propia, pero que a la vez no para de buscar el ser humano. A través de varios capítulos en los que se tocan diferentes temas, el autor nos introduce en un mundo de desasosiego, de crisis vital, por encontrarnos a nosotros mismos, por encontrar el punto necesario para crearnos, para avanzar, para crecer, sin conseguirlo adecuadamente. Unos textos lo suficientemente lúcidos e interesantes (aunque no aptos para todos los públicos, eso también hay que decirlo) en el que nos introduce de lleno en una visión completamente distinta de lo que estamos viviendo, para proponernos el duro ejercicio de pensar en nosotros mismos, en todo lo que está sucediendo, y en cómo vernos en relación con una sociedad, un mundo, una cultura que nos lleva de lleno a no encontrarnos nunca a nosotros mismos.
Siempre me ha interesado la visión de Zygmunt Bauman sobre el mundo que nos rodea. Desde hace años, su visión de un universo que se escapa, de un mundo en el que la inmediatez, lo perecedero, está tan a la orden del día que prácticamente no nos damos cuenta de ello, me hizo reflexionar sobre qué caminos llevamos y en qué nos estamos convirtiendo. Pero tampoco se trata de llevaros a engaño: este no es un libro fácil de leer, porque el autor, como experto en la materia, se nutre de muchas referencias que pueden ser desconocidas para la mayor parte del público. Pero para mí esa es una de las bazas importantes de toda su bibliografía, incluyendo este “Vida líquida” del que os estoy hablando. Leer a un autor que nos haga buscar, que nos haga trastear por el mundo de lo escrito para poder entender algunas cosas de una forma más profunda, es sinónimo de que lo que nos cuenta, lo que nos transmite a través de sus páginas, nos suscita interés.
Nos encontramos, como seres humanos, en una encrucijada constante. ¿Somos libres? Si lo somos, ¿estamos contentos con ello o por el contrario nos llenará de amargura? Vivimos en un mundo de consumo, pero a la vez aquello que consumimos está destinado a desaparecer. En una sociedad tal y como la vemos hoy en día, tendríamos que pensar en qué rumbo tomar o en qué tendríamos que cambiar. Puede que nosotros, como individuos solitarios, no lo logremos, pero desde luego, con lecturas como la que he tenido en las manos, uno comprende que el camino es largo, pero aunque parezca mentira, no estamos solos en este proyecto.
No leí nada de Zygmunt Bauman,no sé si será demasiado ” denso ” para mi ……. Lo que sí leí el año pasado fueron las memorias de su mujer . ” Más allá de estos muros ” de Janina Bauman ,en editorial Kailas . Muy recomendable,merece la pena ,me encantó .