A veces me da la sensación de que no hay quién me entienda. Tengo un montón de libros nuevos que podría videorreseñar y en cambio saco del baúl de los recuerdos El perfume, del alemán Patrick Süskind. Y es que, no sé por qué, me apetecía a mí hablaros de mi experiencia con este libro.
Si bien es cierto que lo intenté leer en su día, cuando tenía unos quince años, tuve que dejarlo por imposible (aunque fuera temporalmente) porque me abrumó demasiado. Las descripciones tan exhaustivas que hace el autor y la crudeza de todo lo que narra fueron demasiado para mí. Así que lo dejé, pero jamás lo borré de mi lista de pendientes. Así que cuando fundamos el club de lectura entre dos amigos y yo, decidí que era el momento de retomar su lectura y recomendársela también a ellos. El resultado no me lo esperaba en absoluto: a los tres nos gustó muchísimo y coincidimos en que las descripciones de los olores (que es realmente lo que merece la pena de este libro) eran sublimes, lo que convertía al libro en una obra imprescindible.
Así que sí, a las cosas hay que darles una segunda oportunidad, porque así puede suceder lo que a mí me ocurrió: descubrir que has cambiado tanto que, algo que llegaste a aborrecer, ahora te apasiona.
Sin duda, un libro fantástico.
De los que te llevan hasta el fondo de la historia y casi te vuelven protagonista.